Se espera que las acciones afirmativas que abren espacios de participación a los jóvenes en las candidaturas a los diversos cargos de elección popular, contribuyan a reducir el abstencionismo en este grupo de la población.
“Desde mi punto de vista su implementación no solo tiene el potencial de elevar la representación de la juventud sino también estimular un mayor interés y participación activa en el voto”, señaló Marcela Denisse Guzmán, presidenta del club Rotaract de Ciudad Victoria, al participar en un foro virtual organizado por el Ietam.
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Mencionó que todavía existen estereotipos donde se cree que ellos no tienen la capacidad de llegar a un espacio de liderazgo, lo que dificulta que asuman roles más prominentes, pues no encajan en expectativas convencionales de lo que es ser un político.
La también activista feminista destacó que con las acciones afirmativas se empujan espacios de liderazgo hacia algo ya más significativo y se contribuye a la posibilidad de realizar cambios profundos en la cultura política.
Defensora de derechos humanos, Marcela Guzmán sostiene que la importancia de estas nuevas disposiciones electorales radica en la capacidad de promover la equidad y la justicia social en la toma de decisiones.
“Estas medidas son esenciales para superar todas esas barreras sistemáticas donde se ha excluido a ciertos grupos; contribuyen a cambiar dinámicas de poder arraigadas, donde al no estar representados todos, no existe al 100 por ciento la democracia”.
La juventud, expuso, ha sido históricamente subestimada, cuando representa una fuerza vital y dinámica en decisiones.
“La juventud es una fuerza vital para la construcción de una sociedad más inclusiva, pero se tiene que cambiar ese chip de solo exigir, para ponernos a entender las estructuras en las que nos desenvolvemos”.
Subraya que la participación activa de las juventudes en esos procesos, no solo enriquece la toma de decisiones con perspectivas frescas e innovadoras, sino que también fortalece una conexión entre políticas públicas y las necesidades cambiantes.
Se promueven igualdades y oportunidades, y se cultiva una democracia mucho más robusta y representativa para las actuales generaciones y las venideras.
Ayuda a superar barreras históricas y estructurales que han excluido a jóvenes, pero considera que estos deben tener ahora la capacidad de estar informados y no quedarse en el discurso del “yo merezco”, pues lo que se necesita son acciones.
VLSS