Con el objetivo de visibilizar el derecho al juego para toda la niñez, cada 28 de mayo mundialmente se celebra el Día del Juego, respaldado en el artículo 31 de la Convención sobre los Derechos de la Niñez de las Naciones Unidas, desde 1999.
La iniciativa de esta celebración surgió por la Asociación Internacional de Ludotecas (ITLA), y posteriormente fue impulsada por la doctora Freda Kim, en 2008.
La niñez tiene derecho al descanso, al esparcimiento, a los juegos y actividades recreativas acordes a su edad, así como participar libre y activamente en la vida cultural y en las artes, según lo destaca el mismo artículo de la Convención.
- Te recomendamos Familia organiza 'cine en casa' para niños de la colonia Eduardo Guerra en Torreón Estados
El juego es un elemento fundamental en el desarrollo infantil, el aprendizaje y la construcción de prácticas ciudadanas, mediante la adquisición de diversas habilidades.
Así lo confirma el especialista Efraín Gaytán Jiménez, responsable de la carrera de psicología de la Facultad de Ciencias de la Salud.
El juego es esencial para aprender habilidades para la vida durante el desarrollo infantil; sin embargo, aplica también para otros adultos miembros de la familia extendida y para los cuidadores de niños que tienen la oportunidad de incidir con el juego en los niños.
Jugar es una de las principales ocupaciones de los niños, es importante para su desarrollo y para que se unan con otros niños. Es también una oportunidad para que los padres se conecten con sus hijos.
Sin duda, el juego es una parte importante del desarrollo del niño, a través de él, los niños aprenden cuestiones tanto motrices, cognitivas, a través de juego.
“No me preguntes de cómo recuperar el juego que teníamos en épocas anteriores, la pregunta sería qué ha habido para modificar, que ya no se den ese tipo de juegos y de hecho, el punto es que cuestiones de adaptación de juegos de niños se ha venido dando a las restricciones que hemos tenido como sociedad a los espacios abiertos, por ejemplo, los espacios de las casas ya no son los mismos, como las casas de nuestros padres y abuelos”.
En las casas hace 50 o 70 años había patios muy amplios donde antes el niño podía jugar en el patio de la casa, eran espacios abiertos.
Las casas ahora de interés social muy pocas veces tienen un área para estimular el juego, “aparte en nuestra área específicamente, el clima no favorece mucho el juego al aire libre, salvo que puede ser por la tarde o en la noche”.
Antes se podía, además las cuestiones de seguridad también han determinado, no hablamos tanto de violencia del crimen organizado, sino con lo que respecta al tráfico.
“Las generaciones de los 80 a 90 podríamos jugar todavía en las calles porque no había todavía esta parte de los automóviles, no se encontraban tan saturadas, podríamos jugar en las calles y un niño por lo general, no decía, ahí viene un carro y dejaba de jugar. Podrías jugar unos 15 minutos a gusto antes de que se presentará otro carro”.
Todas estas cuestiones de seguridad, climáticas, ha hecho que ahora el juego se haga intramuros o directamente en espacios específicos, por eso se han hecho lugares privados para que los niños puedan acudir a jugar, garantizando el clima y seguridad.
En cuanto a las casas, lo que involucra los espacios de la casa, los juegos evolucionan y tienen que ser con dispositivos electrónicos
“Pero qué tienen el dispositivo electrónico, qué le ofrece a los niños de interés y por lo cual, los niños los motivan, pues tienen tres cuestiones que son muy atractivas, ya que el dispositivo te ofrece movimiento, capacidad visual, de que algo se está moviendo, a capacidad del sonido, y la retroalimentación del sonido aparte de que los juegos están diseñados para motivar el logro de los niños, que es lo que lo los hace atractivos, de que se terminó tal misión, entonces dicen hay una recompensa”.
Entonces, el movimiento, el sonido y la emisión de la luz, a niños menores de 5 años, son las tres cosas que lo hacen atractivo, para su desarrollo, “es la necesidad de buscarlos, la necesidad de movimiento, buscar movimiento y la parte de atención, eso se los dan los dispositivos y para los padres es más sencillo ofrecerles eso que ofrecerles un espacio donde puedan jugar”.
Recomendó que con el aprendizaje entre el padre o cuidador y su hijo, seguir motivando estos espacios porque a través del juego también el adulto se convierte en un traductor del mundo hacia el niño.
“A través del juego, el adulto traduce las reglas, el significado de las acciones a los niños. El dejarlos solos en el juego, el niño se va a divertir, pero es muy importante que el padre esté ahí, si participa en el luego, conllevar a que el niño esté interpretando a través de esta visión de adulto, la explicación que tenga de su mundo o de su contexto que tiene cercano”, expuso.
Ha tenido que haber una adaptación a diversas circunstancias, pero el juego tiene que seguir estando y también la participación del cuidador para poder retroalimentar este juego.
La activación física, que es la que más ha disminuido, es un reconocimiento de los pares, de sentirse parte de un grupo y también aprender las reglas de socialización que le permitan ser eso, ya sea con un niño de su edad o adulto mejor.
Sin un niño no juega, es un indicador que no se está desarrollando de manera adecuada, “cuando el niño no lo busca de manera natural quiere decir que hay una larva en el desarrollo y cuando lo privan de jugar, estamos deteriorando el potencial del niño en su desarrollo tanto físicamente como cognitivo”.
Se ha visto privación específicamente en contextos sociales que involucran cuestiones de violencia extrema, en zona de guerra, áreas de desastres naturales, “que se supone serán momentánea hacia los niños involucrados que aun así puedan desarrollar el juego”.
Los niños entienden la vida a través del juego
Los padres son los primeros maestros de los niños y gran parte de esa enseñanza sucede a través del juego, ya que le permite al niño a comprender las reglas de la familia y lo que se espera de él.
Yesenia Coral Covarrubias Leyva, psicóloga, doctora en desarrollo humano, quien trabaja en la coordinación de la carrera de psicología de la Facultad de Ciencias de la Salud subrayó que a medida que los niños crecen, el juego les ayuda a aprender a actuar en la sociedad.
“Es sumamente importante el juego en el desarrollo del niño, lo veo desde la perspectiva profesional como psicóloga, pero también desde la personal, porque son madre”, dijo.
Considera que el desarrollo natural, biológico, emocional, social de los niños, el que tengan estos espacios de acercamiento hacia el juego -cualquier tipo de juegos adecuados a cualquier etapa de desarrollo del niños-, definitivamente son recursos que les ayuda mucho a desarrollar habilidades, no únicamente de motricidad, sino sociales, de comunicación entre pares, de concentración, les ayudan a desarrollar la flexibilidad mental, la memoria de trabajo, el control inhibitorio, “por lo que el juego, es vital para que desarrollen habilidades que como ciudadanos la vamos a necesitar”.
Aunque dijo que si se consideran otros aspectos culturales, “los menonitas, por ejemplo, son una cultura que desde pequeños los involucran en la parte de actividad laboral
“Pero por las características propias del desarrollo biológico de la persona, es necesario estos acercamientos al juego, para acercarlos estímulos que les permitan conocer, explorar, equivocarse, aprender, fallar, frustrarse, enojarse, con habilidades que se desarrollan con el juego, y que finalmente como seres humanos, como adultos, las vivimos, pues vivimos la frustración, la competencia, vivimos perder en algún juego, lo vivimos a lo largo de la vida, el acercar a los niños a esta posibilidad de juego, a estos recursos, la diversidad, pues definitivamente genera creatividad, innovación y habilidad de comunicación”.
Definitivamente, jugar es una forma de acercarse de manera muy íntima a los niños, “porque ellos entienden la vida a través del juego, tener este acompañamiento de las personas más importantes, de mamá y papá, que son sus cuidadores primarios, es un recurso más que les damos a nuestros hijos”.
Es a través del juego, la forma ideal de poder enseñarle a los niños a ser responsables, ya que la responsabilidad es parte de la vida.
“Tus niños o los hijos de las personas van a recordar, mi mamá siempre estaba lavando los platos o mi mamá, a pesar de tener tantos hijos, jugaba conmigo, mi papá sacaba la pelota, mi papá nos sacaba a jugar béisbol, son improntas que se generan de inmediato y es a través del juego”, dijo.
Actualmente, estimular los juegos que incluyan actividad es fundamental, “tenemos la facilidad de la tecnología, puedo poner a mi niño con el celular y él va a estar entretenido mientras yo hago infinidad de responsabilidades que tenemos por hacer, pero estar siempre vigilantes”.
Aunque estimular la motricidad es importante, “esto es a través del juego, es lo que requiera movilidad, entonces saltar, correr, brincar, jugar a 'la trae', a las canicas, generamos habilidades motrices finas en los niños que luego las necesitan en sus contactos académicos, cualquier juego que involucre actividad física y creatividad en el niño adecuado a su etapa de desarrollo es un bien para él”.
arg