Con industria de pan, APAC ha dado empleo a 300 personas con discapacidad

El 70 por ciento de los trabajadores en la panadería tiene una discapacidad y su sueldo es de 5 mil pesos.

La panadería de APAC ha brindado el servicio social para mil 500 alumnos con discapacidad. (Jesús Quintanar)
Karla Guerrero
Ciudad de México /

El centro de producción de pan y refinería de pastas finas de la Asociación Pro Personas con Parálisis Cerebral (APAC) generó 300 empleos en beneficio de personas con discapacidad.

La industria de galletas y pastas finas tiene una plantilla laboral de 12 personas, en las que al menos el 70 por ciento son personas con discapacidad. Además, el cien por ciento de los recursos se entregan al APAC con la finalidad de obtener recursos materiales y humanos para el funcionamiento adecuado del centro, esto incluye la formación de las nuevas generaciones que llegan.

“La finalidad de la panadería es ofrecer un empleo digno a las personas con discapacidad para que puedan ser personas independientes económicamente, pilares en sus casas y que tengan una vida plena y digna. En nuestro centro, al menos ocho personas de toda nuestra plantilla tiene alguna discapacidad”, dijo a MILENIO, Gloria Garza, encargada de ventas de la panadería APAC.

Hace 20 años, la fundadora de APAC, Carmelina Ortíz Monasterio de Molina, decidió “innovar nuevas puertas a la integración social” de personas con discapacidad, a través de talleres formativos que permitieran la rehabilitación de los estudiantes de APAC.

Los talleres formativos funcionaban como “servicio social” en donde los alumnos que cursaban por el estudio en APAC, contribuían a la elaboración de pan, debido a que “la motricidad hace que que tengan mejores habilidades por lo que moldear y decorar pan” ayudaba a su formación física y personal.

Con un hijo con discapacidad, Carmelina no solo presenció la dificultad de los alumnos para realizar las actividades cotidianas, sino además la dificultad para encontrar un empleo, lo que logró que en 2000 convirtieran el taller formativo de producción de pan en industria de empleo en beneficio de niños con discapacidad.

“Realmente pueden sentir cómo están integrados a la sociedad; el beneficio es personal para cada uno de ellos porque se sienten útiles y autosuficientes. Ya no son desplazados ni discriminados, por el contrario, realizan un producto que luego es deleitado por otras personas”, narró la jefa de producción de la panadería de APAC, Laura Santana.

Una vez que los trabajadores con discapacidad ingresan, se les asignan actividades “sin riesgo, esto es el boleo del pan, la preparación de la mezcla, la decoración del pan o galletas así como su empaquetado.

De un taller formativo a máquina de empleos dignos

En 2001, Miguel Ángel Gómez, de 45 años, tocó la puerta para su formación educativa en centro APAC. Luego de 4 años de estudio en la asociación, decidió salir a abrirse puertas en el mundo del empleo en la Ciudad de México.

Tras 10 años de enfrentarse con dificultades para encontrar empleo, como falta de capacidades y aptitudes para un empleo formal, regresó en 2018 a la panadería de APAC.

“Hace 10 años empecé a buscar empleo, pero me decían que no podía hacer varias cosas por mi discapacidad. Cuando me contactó APAC fue para mi algo muy especial, porque antes no tenía un trabajo y ahora tengo hasta un sueldo”, dijo Gómez.

APAC contrata anualmente a su personal de la panadería, abre las convocatorias a través de su sitio web; la contratación se realiza a través de sus bolsas de trabajo. El sueldo para un auxiliar de panadería es de 5 mil pesos mensuales con un horario de las 8:00 a las 15:30 horas.

Miguel Ángel Gómez tenía más de 10 años sin empleo, hoy cuenta con un sueldo de 5 mil pesos mensuales. (Jesús Quintanar)

¿Cómo contribuir a la formación APAC?

Para lograr el objetivo de vender semanalmente 500 panes de muerto y 50 kilos de galletas, el centro de formación pone a disposición su contacto a través de 7352207637.

“Pedimos su confianza para comparar nuestros productos, trabajamos bajo estrictos estándares de higiene e inocuidad con productos de muy buena calidad. Con su compra no sólo colaboran para la educación de niños con discapacidad, también fomentan su inclusión laboral”, exhortó Gloria Garza, responsable de ventas.

Los pedidos se hacen de lunes a miércoles, el jueves preparación de los pedidos y los días viernes realizan las entregas. De ser requeridos, los pedidos llegan a domicilio, de lo contrario pueden recogerlos en calle Dr. Fernando Zárraga 31, Colonia Doctores en la Ciudad de México.


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