María Belém, una víctima de abuso sexual al interior de los Legionarios de Cristo informó en entrevista con MILENIO que, en cuestión de días, se presentarán denuncias penales ante el Ministerio Público en contra de los sacerdotes Fernando Martínez y Eloy Bedia Diez y contra Aurora Morales.
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El primero será acusado de abuso contra al menos seis menores de edad, entre 1991 y 1993; el segundo de encubrimiento pues él se enteró de las quejas que en la década de los noventa le manifestaron varias madres de familia sin hacer nada.
Además de Aurora Morales, quien en ese tiempo era maestra del Instituto Cumbres a cargo de la Congregación de los Legionarios de Cristo. “Aunque hay más involucrados, que se les juzgue a todos”.
Afirmó que le llama la atención que la orden de los Legionarios de Cristo no mencione para nada en sus comunicados a Bedia y Morales.
“Quienes saben y son testigos de crímenes si no denunciaron se vuelven cómplices del delito y en la misma gravedad sea quien sea”, acusa.
Recién se dio a conocer que el sacerdote abusador, Fernando Martínez, había sido retirado de su “estado clerical”.
“Eso a mí no me importa, el que Fernando Martínez hay renunciado a su estado clerical, ese privilegio lo dejó hace mucho. Sí es un paso, pero que llega demasiado tarde, pues debió de haber dejado de ser sacerdote hace mucho tiempo”.
Asimismo, aseguró que una denuncia de abuso sexual siempre le toma tiempo a las víctimas. De ahí que este delito, “nunca prescriba. La verdad es que coincido: no debe prescribir”.
La víctima reiteró que para ella resulta satisfactorio que este tipo de delitos al interior de la Iglesia no prescriban nunca.
Un día antes el presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Rogelio Cabrera López, manifestó en conferencia de prensa estar a favor de que ese tipo de delitos no prescriban y dijo que apoyaría las iniciativas que existen en el legislativo, tanto a nivel federal, como estatal sobre el tema.
Volvió al caso de Eloy Bedia a quien, al parecer, buscan proteger; actualmente es Padre Capitular para 2020.
“Él gestionó el caso de Martínez en Cancún, habló con las mamás y dijo que ya no iba a estar en Cancún en cuestión de días. Eso a la lógica común lo envuelve completamente, pero me llama la atención que no se le menciona en ningún comunicado de la Legión. Él es el encubridor directo, él sí es responsable, él no denunció; si los delitos prescribieron es responsabilidad de él, pues tenía conocimiento de la conducta de Fernando Martínez y debe ser llamado a cuentas del alto clero y de la justicia”, finalizó.
kvd