Sapal asegura buen manejo en obras de colonia Buenos Aires

Comunidad

La dependencia aseguró que desde el inicio se informó a los vecinos de las obras a realizar y señalaron que debido a las lluvias de últimos días no se había podido intervenir

Gran agujero provoca peligro para los transeúntes. (Renata Quintanar)
Renata Quintanar
León /

Debido a las últimas denuncias de afectaciones a causa de obras realizadas por el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León, dicha dependencia aclaró para Milenio los procesos que se están realizando a beneficio de la ciudadanía.

Con respecto a los reportes de la Colonia Buenos Aires por la elaboración del colector pluvial Wigberto Jiménez, la dirección de SAPAL informó que previo a su construcción se realizaron campañas de socialización con los vecinos para que estos últimos estuvieran informados.


Aseguraron que desde el inicio se informó a la Colonia sobre las zonas donde se realizarían estas obras y el tiempo que tardarán en acabar. Además de los beneficios y las consecuencias de abrir esta zanja en el pavimento.

Destacaron la “evidente señalización” que tienen estas obras y el consentimiento de los colonos para conocer el proceso y la función que brindará una vez terminada.

Este canal tiene como propósito disminuir los estragos e inundaciones de la zona, pues pretende recibir el agua de las lluvias para así conducirlas a los diferentes arroyos y plantas tratadoras de la ciudad.



El cual lleva actualmente un avance del 57 por ciento, lo que calificaron como un avance considerable y reiteraron su posible finalización para mediados del mes de diciembre. Recalcando que con el continuo avance y rapidez con el que se ha ido realizando posiblemente puedan concluir antes.

“No es un agujero mal hecho ni un trabajo a lo tonto, es parte de (...)Es un trabajo en conjunto donde muchísimos trabajadores están de por medio, supervisores inclusive”, mencionaron.

Señalaron que debido a las lluvias de estos últimos días no se había podido intervenir, puesto que se debe esperar a que se seque la tierra de dicha zanja para poder revestirla con concreto, ya que al encontrarse humedecida terminaría por levantarse.

“Estamos para servir, en ningún momento les estamos quedando mal a las personas, ni mucho menos cuando hay un historial de una comunicación con ellos”, explicaron.

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