Al sur de la ciudad de León, se encuentra una pequeña comunidad indígena a la que le suelen llamar “La Mixteca”, en la calle Hacendado, y al igual que en todo el estado, los planteles escolares de esa zona participaron en el arranque para el regreso a clases presenciales pese a las dificultades de obtener recursos que mejoren la infraestructura.
Se tratan del Jardín de Niños y la Escuela Primaria Indígena Bilingüe José María Morelos, los cuales hasta ahora cuentan con uno y tres maestros respectivamente, y ambos en conjunto cuentan con una matrícula de más de 65 alumnos.
"Con lo que batallamos más tanto los niños como los maestros es que en ocasiones carecen de alimentación, eso es como una debilidad para nuestra escuela el que avance a un cierto nivel", señaló Luís Zamora, maestro de primaria de primero y segundo grado así como el director de dicha institución.
El director de esta institución, Luis Zamora, comentó que desde esta semana los estudiantes regresaron a las aulas de manera presencial, solo que como son tres salones, se les ha estado rolando los días de asistencia.
Los niños de esta escuela tuvieron dificultades para estudiar en las clases en línea, Luís Zamora, cuenta que desafortunadamente una parte de ellos no tenía los recursos necesarios para pagar internet o un dispositivo electrónico que les permitiera seguir al tanto de las clases, lo que impulsó a que los maestros buscaran formas de que no perdieran sus estudios.
"A los niños que no se conectaban los buscamos, les pusimos material especial, les hicimos cuadernillos y se los entregamos para que trabajaran en casa, después, otra vez los padres de familia nos entregaban los trabajos", añadió Luís.
De los estudiantes que pasaron por estas aulas, cerca del 50 por ciento de ellos ya se encuentra cursando la universidad, y varios de ellos incluso son licenciados en derecho.
Información de la Secretaría de Educación de Guanajuato señaló que solo el 18.1 por ciento de las escuelas del Estado regresarían a clases totalmente presenciales, particularmente las que se encuentran en las comunidades rurales y zonas alejadas por su bajo índice de contagios por coronavirus.