La ola de violencia que atraviesa el municipio de Celaya terminó con la paciencia de miles de alumnos universitarios y miembros de comunidades estudiantiles de la región.
Este miércoles por segundo día consecutivo se organizó una manifestación masiva en la que se exigió justicia y seguridad a las autoridades por los crímenes de estudiantes; el más reciente, el de Gabriel Luna Ibarra, asaltado y herido de muerte el pasado sábado 28 de septiembre.
El martes participaron más de dos mil alumnos en una manifestación; ayer fueron más de nueve mil jóvenes de diferentes planteles educativos y preparatorias quienes se unieron a la llamada Marcha por la Paz, convocada a través de redes sociales.
Un primer contingente partió desde las instalaciones del Instituto Tecnológico de Celaya (ITC). De ahí caminaron hacia la Presidencia Municipal con la firme intención de externarle sus exigencias a la alcaldesa panista Elvira Paniagua.
En el camino se sumaron alumnos de la Universidad de Guanajuato, Universidad de León Campus Celaya y la Universidad Politécnica de Guanajuato, con carteles en los que se podían observaban frases como “queremos llevar a casa un título y no un acta de defunción”.
También se observaron otros letreros en los que se leía: “queremos una fiesta de graduación no un funeral”, “escuelas unidas jamás serán vencidas” y gritaban “de qué sirve estudiar si nos están matando” y “Elvira Paniagua no amas a Celaya”.
“Queremos seguridad como estudiantes es muy difícil el hecho de que no sabes si cruzar la calle o irte por el puente peatonal, vas a sufrir un asalto, vas a subir un robo, como le paso a nuestro compañero Gabo, en un robo que él entregó todas sus pertenencias sin poner resistencia, que sea asesinado y que quede impune”, dijo uno de los alumnos del ITC.
“Ya basta, hay demasiadas acciones de la delincuencia en contra de los muchachos robándoles sus computadoras, su dinero, no se vale, deja tú las computadoras, ¡ahora (les roban) la vida!, necesitamos que la presidente presida, una gente que preside está delante de la adversidad, recibiendo los trancazos y equilibrando a los lados la inseguridad”, comentó Bertha Gómez, ciudadana y vecina del ITC.
Cuando llegaron al edificio de Presidencia Municipal rodearon varias ocasiones el Jardín Principal con la consigna: “que salga Elvira Paniagua”. En ese momento la alcaldesa se encontraba en una reunión privada con representantes de diferentes instituciones educativas con el objetivo de implementar acciones para mejorar la seguridad en las escuelas.
Al paso de unos minutos, ingresó otro contingente de alumnos y llenaron el patio central del recinto municipal, cuya fuente estaba tapizada con cartulinas en las que se exigía apoyo a las autoridades.
Ahí, los estudiantes no se deban por vencidos y continuaban gritando hasta que finalmente la alcaldesa salió a ofrecer un mensaje ante la multitud con el apoyo de un megáfono y acompañada de agentes de la Guardia Nacional.
“Aquí en Celaya, aquí en su casa, en presidencia no nada más estoy yo, está la fuerza del estado y de la Federación entendiendo y escuchando sus demandas llegando a acuerdos muy puntuales de acciones que se estarán implementando y multiplicando en instituciones educativas”, explicó.
Después de ofrecer su mensaje, la Primer Edil ingresó a su despacho, mientras los inconformes gritaban y exigían su renuncia.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana de Celaya no reportó incidentes durante la manifestación. Horas más tarde, la administración municipal informó que en la reunión ya mencionada, con representantes de las instituciones educativas, se establecieron una serie de compromisos, como el esclarecimiento a la brevedad y el castigo correspondiente a los responsables del asesinato de Gabriel Luna.
Se acordó establecer programas integrales de acciones de seguridad por parte de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Fuerzas de Seguridad Pública del Estado (FSPE) y Guardia Nacional, además, se intensificarán en lo inmediato los operativos de vigilancia en las instituciones educativas.
Por su parte y a través de un comunicado el Gobierno del Estado reconoció que estas manifestaciones son justas ya que buscan la paz y “que la educación es el camino correcto para transformar la sociedad”.
“Intensificaremos operativos en zonas aledañas de colegios, así como en toda la región, a fin de garantizar la seguridad de todos los habitantes cada gobierno desde sus funciones deberá cumplir con el mandato de ley”, se lee en la misiva.