La joven Vianey Viridiana Vargas Ávalos, desde hace más de un año, ha vivido un calvario al no poder tener en sus brazos a su pequeña hija de seis años de edad, debido a que su exesposo la sustrajo, con lo que inició una batalla legal que no le ve fin.
Originaria de Ciudad Madero pero criada en Ciudad Mante, se casó a los 19 años de edad en febrero del 2012 con otro joven, Alfonso Alejandro, de profesión abogado, con quien procrearon a una pequeña. Sin embargo, cuatro años después tramitó su divorcio necesario debido a violencia intrafamiliar.
Decidió mudarse a Madero, junto con su hija, debido a que procedió un convenio promovido por ella y elevado como asunto juzgado donde la niña estaría a su cargo, incluso establecido en el acta de divorcio.
Fue en octubre del año pasado cuando empezó el gran problema, pues la pequeña fue arrebatada a su abuela, madre de Vianey, antes de entrar a su domicilio.
De inmediato la joven recibió una llamada en su trabajo, donde le explicaron lo sucedido y como pudo trató de localizar al individuo, sin embargo recibió negativas y amenazas, por lo que inició el procedimiento legal conducente, del cual ha obtenido largas en una batalla de demandas y demandas.
En el camino se ha encontrado con un sin fin de trabas legales, promovidas por su exesposo, quien aprovechando sus conocimientos en asuntos legales, entre otras situaciones, ha generado que el caso se alargue, afectando de paso a la pequeña en su crecimiento, pues incluso, según dice la afectada, ha llegado a desconocerla.
“Se está viendo vulnerable mi hija y como no he contado con asesoría de un abogado particular todo me ha sido muy lento”, dice desesperada, quien además tiene 9 meses de embarazo, y así, ha acudido a los llamados legales, con el riesgo que implica.
JERR