En Jalisco, 18 mil 578 jóvenes que no estudian ni trabajan, conocidos como ninis, lograron ser vinculados a casi 5 mil centros de trabajo, declaró Merilyn Gómez Pozos, coordinadora del programa federal Jóvenes Construyendo el Futuro.
Incluso, algunos de ellos, han sido contratados por tres empresas de diferentes giros.
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Lejos de fracasar el programa federal, dijo, rebasó las expectativas. “Ha sido éxito, muchos de los jóvenes han sido contratados en las empresas. No solo comenzaron su capacitación, sino que fueron tan buenos perfiles los que llegaron a trabajar que los contrataron de inmediato”, reveló Gómez Pozos.
Sin embargo, la funcionaria federal reconoció que a principio de año, se enfrentaron a la falta de conocimiento y desconfianza hacia el programa, principalmente de la iniciativa privada.
Además de que no se tenían las vacantes para ofrecerles a los jóvenes, pero hoy hay disponibles 35 mil, destacó.
“Nos dimos a la tarea de explicarles en qué consistía el programa y de que los perfiles de los jóvenes iban a ser idóneos para sus centros de trabajo. No quiere decir que íbamos a mandar a los jóvenes así al azar. Ellos van a un centro de trabajo cuando concuerda el plan de capacitación que ofrece el centro y las aptitudes, el perfil de cada joven que está registrado en el programa“, expuso.
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Estimó que una vez que los empresarios e industriales conocieron el programa Jóvenes Construyendo el Futuro en Jalisco, comenzaron abrir sus puertas.
“Conocieron testimonios de los jóvenes que ya estaban inmiscuidos, fue lo que les dio la confianza en el programa. Además del trabajo que hicimos en la coordinación y de ahí que se hayan abierto más vacantes”, refirió.
Gómez Pozos, informó que en la entidad no se estableció una meta anual, pero “nosotros teníamos previstos que de los 2 millones 500 mil jóvenes a nivel nacional, en Jalisco fueran 50 mil en el sexenio”.
Recordar que el programa está dirigido a jóvenes que tienen entre 18 y 29 años de edad, y que no estudian, ni trabajan; esto es un requisito obligatorio. A los beneficiarios se les canaliza a centros de trabajo que pueden ser del sector público, privado y social. Cada uno recibe una beca por 3 mil 600 mensuales y su inscripción al Instituto Mexicano del Seguro Social para que tengan cobertura médica. Este apoyo sólo será por un año. La intención es que en ese lapso, el 50 por ciento de ellos, se quede con un trabajo definitivo.
MC