El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, expresó su rechazo a la cultura del descarte y de la muerte; además, destacó la importancia de la defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural y se pronunció en contra del aborto.
Al encabezar la misa dominical en la Basílica Catedral de Puebla, Sánchez Espinosa lamentó que la sociedad no valore la vida y no le brinde su lugar a los adultos mayores o a las personas que están enfermas bajo el argumento de que ya no son productivos y no están cumpliendo con determinadas funciones.
“Rechazamos todo lo que contribuye a la cultura de la muerte, a la cultura del descarte como lo llama el Papa, también profesamos nuestra esperanza en la plenitud absoluta de la vida y en la consumación de todo”, apuntó.
Para el líder de la grey católica en Puebla, la violencia, la inseguridad y los abortos se presentan en la sociedad cuando se deja de valorar la vida y cuando domina una cultura el descarte de los seres humanos.
“A propósito de la violencia, la inseguridad, del aborto, descartar a ese ser inocente, de los ancianitos enfermitos, quererlos descarta de la sociedad porque están enfermos, porque según la sociedad ya no producen. Esa es la cultura de la muerte y vivimos en esa sociedad, queremos descartar todo eso”, explicó.
En su mensaje a los fieles católicos, el arzobispo de Puebla llamó a contrarrestar las desigualdades y los abusos que se comenten contra las personas más necesitadas y que están sufriendo en tiempos pandémicos.
Al mismo tiempo, Sánchez Espinosa propuso mantener la esperanza ante las complicaciones que se están presentando y a brindar apoyo a quienes más necesidades enfrentan en la actualidad.
“La vida no consiste en perpetuar las desigualdades, los abusos que se comenten en este mundo. La sociedad en que vivimos hoy, nosotros, es mayoritariamente, saducea, o sea, nos preocupamos de vivir el bienestar en esta vida de una manera frívola, disoluta, pecaminosa, disfrutando del propio bienestar y olvidando a quienes viven sufriendo”, añadió.
Sánchez Espinosa destacó que la cultura del descarte desencadena que las personas estén buscando la felicidad en caminos equivocados y a costa del sufrimiento de los demás, sin apoyar a quienes están enfrentando dificultades.
“Esta mentalidad favorece que mucha gente busque la felicidad en caminos equivocados, vive una cultura que valora la felicidad ficticia, pero cuando se comparte el sufrimiento de los pobres, de los desplazados, de los sometidos a cuotas injustas, las cosas cambian”, destacó.
El arzobispo de Puebla llamó a valorar la vida desde la concepción y hasta la muerte natural; además, resaltó que cuando un ser querido se adelanta en el camino, los familiares y amigos rezan, le hacen un novenario y expresan sus intenciones para que alcance la eternidad.
“Cuando se pierde a un ser querido, le lloramos, le celebramos misa, le hacemos un novenario o un triduo porque es una manera de mostrar que creemos que existe una eternidad después de la muerte biológica y que las oraciones tienen sentido”, finalizó.
CHM