Miembros de la Gran Asamblea de Damnificados realizaron la tarde del miércoles un monitoreo ciudadano en el río Tula, después de que circulara información sobre un eventual incremento considerable en el nivel del caudal.
María Berenice Pecina Jiménez, presidenta de dicha agrupación ciudadana surgida a raíz de la inundación del 6 y 7 de septiembre de 2021, participó en esta vigilancia e indicó que en un plantel escolar se había emitido la autorización para que los estudiantes salieran temprano y se retiraran debido a una crecida en el río Tula.
Dijo que como organización acudieron al puente Zaragoza para el monitoreo, aunque también se comunicaron con personal de Protección Civil (PC), quien les informó que no había ningún riesgo, por lo que Pecina manifestó su extrañeza por la acción que realizaron los directivos del plantel escolar al permitir la salida anticipada de alumnos por un supuesto riesgo.
Expresó que a pesar de esta confusión los monitoreos ciudadanos continuarían, a fin de cerciorarse por cuenta propia de las condiciones del río, pues existe el temor entre la población por estos incrementos repentinos, particularmente ahora que está en obras la zona.
Por su parte, la alcaldía de Tula de Allende, encabezada por Mario Guzmán Badillo, descartó riesgo para la población por el aumento de los niveles del río a causa del vertido de 40 metros cúbicos por segundo.
Aunque la alcaldía admitió que la percepción del aumento sería considerable por las ataguías que se encuentran en el propio río, el cual durante la tarde del miércoles registran un nivel 20 19 60, a la altura del puente Metlac.
Hacia la tarde-noche el nivel del río Tula mostró una disminución en torno a su vertido de gasto, el cual se situó para esa hora en 10.19 metros cúbicos por segundo, mismo que no representaba ya un riesgo para la población.
De igual manera se informó que se tenían contempladas para las siguientes horas precipitaciones con intervalos de chubascos de 5 a 25 milímetros, con un nivel 20 18 50 en la escala situada en el puente Metlac, además de vientos con rachas de 10 hasta 40 kilómetros por hora.
Pero a pesar de ello, este aporte por escurrimiento no representaba un riesgo para la población de la zona ribereña, descartando así alguna evacuación para esta área que se vio afectada por la inundación de septiembre de 2021.
El gobierno municipal pidió a la población no difundir información falsa para evitar caos y posibles incidentes, por lo que exhortó a la ciudadanía mantenerse al pendiente de la información oficial.
Del mismo modo solicitó a la población no acercarse a las riberas, especialmente en zonas de riesgo que por ende pudieran presentar desgajamientos, y resaltó que los monitoreos por parte del área de PC continuarán, para emitir la información correspondiente.