En noviembre de 2006, el museo del Transporte Eléctrico de la Ciudad de México, abrió sus puertas para mostrar al público que nuestro país fue pionero en la historia del transporte público del país.
Actualmente, este museo muestra la evolución tecnológica del transporte por su adaptación a nuevas condiciones geográficas y demográficas, en el que se ha caracterizado por brindar un servicio a miles de usuarios durante décadas.
En entrevista con MILENIO, Juan Antonio Pereyra, instructor del Servicio de Transportes Eléctricos, detalló que la unidad más antigua que se tiene en este museo es el Tranvía "El Cerito", ensamblado en los Talleres de la Indianilla en 1898.
“Es muy común ver a adultos mayores que vienen aquí a recordar sus épocas, ya que muchos detallan que fue en este tipo de vagones en los que se conocieron. Y qué en específico, “El Cerito” se encuentra igual a como circulaba en la capital”, explicó.
Este transporte remplazó a los tranvías de mulitas. Operó con otros tranvías dentro de la red de tranvías de la Ciudad de México. En 1986 volvió al servicio en el tren ligero.
“Finalizó sus recorridos en 1990, esta unidad tiene más de cien años en su época, solo podían viajar los de clase alta. Todo su interior era de madera y corrían a una velocidad en promedio de 30 km/h”, dijo Pereyra.
Otro tranvía que se ubican en el museo es la de modelo PCC, que en 1954 remplazó a los furgones como el cerito, caracterizados por ser más silencioso, aerodinámicos y veloces alcanzando el doble de velocidad del cerito, además eran más cómodos y espaciosos.
“Los interiores ya eran hechos de acero y los asientos cubiertos de piel. Fue hasta 1984, que dejaron de dar servicio. Cuando se pensaba que estas unidades ya no iban a circular fueron reconstruidos y en grupos 2 o 3 vagones, formaron los trenes ligero de la línea que corre de Taxqueña a Xochimilco”, dijo el Instructor.
El museo cuenta con más unidades como trolebuses, y que justo son algunos que dejaron de circular a principios de los 2000’s.
“Por ser un modo de transporte de avanzada tecnología, todos buscaban sacarle un buen provecho en la manera de utilizarlos, iban desde carros motores de primera clase, carros remolcados para segunda clase, carrozas fúnebres, transportaba a los soldados, en campañas políticas, como transbordo en las estaciones del tren, otros mas prestaban servicio a los campesinos que llevaban sus productos desde Xochimilco o Azcapotzalco al centro de la Ciudad, estos últimos eran totalmente descubiertos como plataformas de ferrocarril con un mástil central donde se colocaba el trole”, detalló.
Este museo está abierto de lunes a domingo de 9:00 a 17:00 horas, y es totalmente gratuito.
LG