A partir del primer minuto de hoy, jueces y magistrados del Cuarto Circuito del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) se sumaron a la suspensión de labores en el Poder Judicial de la Federación en Monterrey, ante la serie de reformas promovidas por el Presidente de México.
El lunes, trabajadores del CJF iniciaron la suspensión de labores y se manifestaron en las calles de la ciudad y afuera de las instalaciones del Poder Judicial de la Federación.
Hoy la suspensión de labores continúa con la incorporación de algunos jueces y magistrados, como la magistrada Rebeca del Carmen Gómez Garza, y el magistrado Héctor Guillermo Maldonado Maldonado.
Una de las principales inconformidades es la reforma para que jueces, magistrados y ministros puedan ser elegidos por voto popular, ya que consideran que, de ser así, podrían no llegar al cargo los juristas más preparados.
Pese a ello también señalaron que las 100 modificaciones que se le hicieron a la Ley del Poder Judicial afectan los salarios de los trabajadores, aunque esta no es la principal molestia.
“No es por cuestiones de privilegios, no es cuestión de salarios; los trabajadores sí se ven afectados en sus sueldos, pero no es tanto eso, es la independencia judicial”, dijo el magistrado Guillermo Maldonado Maldonado.
Aunque la manifestación sigue, los trabajadores no han bloqueado las vialidades principales de la ciudad, sino que se han limitado a lanzar consignas y mencionaron que solo harían una pausa a la suspensión de labores para atender asuntos de carácter urgente.
El magistrado Antonio Ceja Ochoa, director regional de la Asociación de Jueces y Magistrados del Poder Judicial de la Federación en Nuevo León, señaló que la iniciativa no debe aprobarse con modificaciones por cuestiones como: “Despido masivo de trabajadores”, “Reemplazo por personas elegidas por voto popular”, “Sepulta la carrera judicial”, “Destroza aspiración legítima de trabajadores de ascender” o “Destitución y reemplazo de mil 700 juzgadores no resuelve necesidad de la población”.
“Nunca pensamos como juzgadores que las circunstancias que nos toca vivir nos orillen a llevar a cabo estas acciones extremas, sin embargo, debemos recordar que desde su origen en nuestro país.”
“El Poder Judicial nació en medio de convulsiones el 7 de marzo de 1815 cuando se instala el primer supremo tribunal de justicia en América, en Michoacán, apenas conformado por tres juzgadores en plena lucha por la independencia.”
“Sus miembros fueron perseguidos como criminales, expuestos ante la sociedad de su tiempo por el atrevimiento de impartir justicia mediante la aplicación de las leyes con la legitimidad que les dio la Constitución del 22 de octubre de 1814. Resolvieron casos que llegaron a sus manos de personas que confiaron en ellos, confiaron en sus jueces”, señaló Ceja Ochoa.