Para la cena de fin de año, los regios cambiaron la tradicional pierna de cerdo o tamales, por la carne asada.
Con una temperatura de 30 grados que registra el Área Metropolitana de Monterrey este 31 de diciembre de 2021, desde muy temprano se observaron largas filas en las afueras de las diferentes sucursales de las carnicerías Ramos, San Juan, JT, así como en las áreas de carnes de los supermercados HEB, Soriana y Walmart.
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En un recorrido que realizó MILENIO se constató que las filas llegaron a hacer de casi dos horas o más para entrar y ser atendido.
Ricardo, un joven que hacía fila, dijo que el día está para una “carnita asada”, por eso optaron por asar carne en lugar de tamales que tradicionalmente es lo que acostumbra su familia el 31 de diciembre.
Ni los altos precios impidieron que los regiomontanos escogieran para su cena de fin de año un corte de carne. Por ejemplo, el kilogramo de aguja norteña tiene un precio de 189 pesos, pero también llega hasta los 204 pesos.
La arrachera, uno de los cortes preferidos de los regiomontanos, llega a costar hasta 257 pesos el kilogramo.
Un kilo de T-Bone cuesta 279 pesos, mientras el kilo de picaña tiene un costo de 319 pesos; un corte que hoy en día está muy de moda entre los regiomontanos.
Para este 31 de diciembre, las cadenas de carnicerías cerrarán sus puertas a las 17:00 horas, o bien, cuando se les acabe el producto.
A la compra de la carne se suman otros productos, como carbón, tortillas, aguacate, tomate, chile, cebolla, papa, queso, refrescos y la cerveza.
De esta manera, los regios despedirán el 2021 con un clima de verano, un buen corte de carne y una cerveza, para recibir el 2022.