El gobernador del estado, Omar Fayad Meneses, señaló que el desbordamiento del río en Tula fue fortuito e intempestivo y apuntó que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) era la encargada de emitir un reporte de alerta sobre el incremento de las lluvias.
“Fue una cosa increíble, difícil de prever para muchos, nadie puede emitir un reporte de la gravedad del asunto solo la Conagua, ella es la autoridad encargada de decir si lo va a haber por la información que tenga de inteligencia meteorológica o no lo va a haber y la magnitud de lo que pueda haber”, sostuvo en entrevista para MILENIO Televisión.
Sin embargo, apuntó que aunque la Comisión Nacional del Agua hubiera emitido un reporte con bases científicas “es muy difícil prever todo en los fenómenos meteorológicos”.
Cuestionado si la Unidad Municipal de Protección Civil de Tula o Protección Civil estatal tenían información que pudiera alertar sobre el desbordamiento del río apuntó: “yo pienso que sí, no podría asegurarlo, esta es una pregunta para la autoridad responsable de emitir los comunicados y la gravedad de los mismos”.
Comentó que la información de las presas, las puertas y las compuertas de las mismas las abre la Comisión Nacional del Agua. En Hidalgo la Conagua opera seis presas, la presa Requena es la más cercana a Tula.
Respecto a su la inundación de las colonias aledañas al centro de Tula fue producto de una apertura de compuertas de las presas, el mandatario estatal indicó que el agua rebasó todos los niveles de los ríos y las mismas presas, “por eso está la tragedia en siete colonias porque se desbordó todo”.
Llaman a desalojar las casas
Fayad Meneses reconoció que se tiene una situación grave en Tula por la inundación y sus siete colonias y apuntó que desde el lunes se están realizando las tareas de rescate para sacar a la gente de sus casas.
“Prácticamente se ha logrado desalojar, prácticamente hoy no corre nadie peligro”, aseveró, sin embargo puntualizó que hay gente que no quiere ayudar a desalojar, quienes están en los segundos o terceros pisos de sus hogares porque no quieren abandonar su casa.
Ante ello, hizo un llamado a todas estas personas a desalojar para poder hacer el desazolve de sus casas y subrayó que se tienen instalados ya los albergues para regularizar la situación, “la recomendación es que hay que alejarse de la zona ribereña”.
Insistió en que las personas que siguen en sus casas se trasladen a los albergues pues enfatizó que no hay necesidad de quedarse en sus hogares poniendo en riesgo su salud y la de sus familias.
“El llamado es que la gente que vive en el cauce del río, que vive en la cercanía de las presas Endhó y Requena y también en Alfajayucan, en Ixmiquilpan, vayan a los albergues que tenemos disponibles”, reiteró.
El gobernador puntualizó que se tienen cinco albergues disponibles en Tula, cuatro en Tepeji del Río y tres en Ixmiquilpan, “para que la gente se vaya a los albergues y no se quede en la ribera ni de los cauces de los ríos ni de las presas esta región de Tula que se está viendo tan afectada por las lluvias”.
Llamó también a la solidaridad de las personas para apoyar con víveres a los 60 centros de acopio que ha instalado su administración en cada una de sus secretarías en Palacio de Gobierno.
“Todo el Palacio de Gobierno será centro de acopio para ayudar a los damnificados, las instalaciones del DIF estatal van a ser centro de acopio para quienes no quieran enviar, siempre se necesitará agua, comida enlatada, cobijas, colchonetas, ropa, enseres porque la gente lo perdió todo”, concluyó.