La Sinfónica del Estado de Hidalgo inicia en 1901 en la administración del gobernador Pedro L. Rodríguez. A 120 años de existencia, se han formado grandes músicos en las filas de la agrupación.
Ahora durante la pandemia, los músicos hidalguenses se congregan entre las paredes del Teatro Bartolomé de Medina, donde surgen historias en común y por un mismo objetivo: el arte.
El maestro Marco Antonio Orozco Hernández, oriundo de Pachuca de Soto, dirige la Sinfónica desde hace 20 años y hace dos inició el proyecto para tener una Orquesta Sinfónica de Hidalgo conformada por 60 músicos que se dividen en secciones instrumentales: las familias de las cuerdas, aliento madera, aliento metal y percusión.
Entre los músicos se encuentra la violinista Fernanda Badillo Calva quien a temprana edad su padre le inculcó el gusto por la música, enseñándole a tocar instrumentos folklóricos de la huasteca. Su talento la ha llevado a presentarse en diferentes partes del mundo: España, Polonia, Holanda, Italia, Portugal, Argentina, Estados Unidos y Colombia.
También se encuentra el destacado flautista Roberto Adrián Vázquez, egresado del Conservatorio Nacional de Bellas Artes, quien ya ha tocado en diferentes orquestas del país como la de Aguascalientes y Monterrey.
El maestro Marco Antonio Orozco se sienta a lado del piano negro y acomoda su antebrazo derecho al instrumento y con voz firme menciona la forma de trabajar dentro de la Orquesta.
“Es complejo trabajar con diferentes personalidades y diferentes expectativas, sin embargo, todos tenemos un objetivo común que es la música, es decir, cuando uno se enfrenta a una obra, el objetivo es hacer una interpretación lo mejor posible”.
En el caso del director, tiene que dar una idea general, tiene que hacer una versión propia que él tiene que hacerles saber a los músicos para que logren la interpretación, relata en entrevista con MILENIO.
Marco Antonio también resalta lo que implica ser músico y la preparación que conlleva tocar un instrumento en un escenario.
“La carrera de un músico es más de 5 a 10 años, ese es el principio, porque el estudio es diario, los músicos son como atletas de alto rendimiento, tal vez su actuación en las olimpiadas dura muy poco comparado con todo lo que tuvieron que pasar para llegar a los juegos olímpicos, es lo mismo con los músicos de la orquesta, tienen que pasar años de estudio y ejercicio para tocar determinadas obras”.
“Una orquesta no es como los mariachis que tienen un repertorio, los programas no son iguales, los autores son diferentes”.
La evolución y las diferentes épocas han ido evolucionando la música, incluso, la participación de la mujer dentro de las orquestas.
“Siempre se ha visto en las orquestas que los hombres son los principales, pero ahora nos han dado más oportunidades como solistas, participar en entrevistas y conferencias”, agrega Fernanda Badillo quien resalta que cada día hay más mujeres que buscan prepararse de manera profesional en la música, creando así espacios equitativos entre el gremio.
Con la pandemia se han tenido que reinventar, ir a un diferente ritmo y adecuarse a las circunstancias, no obstante, no ha sido ningún impedimento para continuar con sus actividades y conciertos, que ahora realizan de forma virtual.
“La pandemia nos tomó de sorpresa, los maestros tienen que tener mucha creatividad e iniciativa porque tienen que buscar material para grupos pequeños y hacer grabaciones; las ventajas es que podemos llegar a más personas por las redes sociales; las desventajas es que hace falta el calor, la energía, el diálogo con el público”, señaló el director.
El flautista Adrián Vázquez mencionó que los músicos se han tenido que reinventar a 100 por ciento, hacer mucha música digital, “parece fácil, pero es de lo más difícil, es más sencillo dar un concierto en vivo que estar al frente de una cámara”.
“No sientes el calor del público, es una sensación diferente, que nunca se podrá comparar el calor humano con el de una máquina”.
“Si a los jugadores de fútbol les hace falta las porras, también a nosotros no hace falta el público”, recalcó con sentido del humor el director.
De igual forma, explicó que los sonidos de los instrumentos de la orquesta son diferentes a los instrumentos eléctricos.
“Los instrumentos que se ejecutan en la orquesta son instrumentos que dan un sonido natural, es decir, no hay cosas eléctricas, es un sonido directo; cuando se escucha la flauta es el aire que pasa por el tuvo, en cuestión de las cuerdas, es el arco que frota directamente con la cuerda y da el sonido natural; no necesitan estar conectados a la electricidad para generar sonido y eso es lo exquisito de la orquesta”.
El director aludió a la importancia de dar oportunidad a conocer diferentes géneros, ya que le parece, que la calidad no conoce de géneros musicales.
Fernanda Badillo ante la pandemia dice que hay dos opciones: te caes o sigues adelante; porque la música requieré de mucha disciplina.
Todos coinciden con no bajar la guardia ante el covid-19 e invitan a seguirlos en las redes sociales a través de la Secretaría de Cultura y la página oficial de la Orquesta Sinfónica del Estado de Hidalgo y en cuanto la situación mejore invitan al público a que acudan a los conciertos en vivo. Adrián Vázquez finaliza: “Sin música nada tiene sentido, lo más simple necesita música”.