Activistas lanzan un llamado a Protección Civil ante el riesgo que representa el que las lagunas de la zona se estén secando, por la presencia de cocodrilos que además están en periodo de anidación y al perder su hábitat se pueden convertir en una amenaza para familias de sectores aledaños.
Ni siquiera se tiene un censo de la presencia de saurios en los vasos lacustres, por lo que es fundamental proteger a la población de posibles ataques de estos reptiles, advirtió Abianez Sánchez Gallardo, presidenta de Nutrias con Causa.
- Te recomendamos Agua de San Luis Potosí, opción para abasto en zona sur de Tamaulipas Estados
“La mayoría de las lagunas ya están secas, las únicas dos que todavía tienen un poquito de agua son Champayán y Chairel; es peligroso porque los cocodrilos se están quedando sin su hábitat y salen en busca de agua, es urgente que Protección Civil tenga un plan de acción al respecto”, alertó.
Apuntó que haber tenido un censo real sobre cuantos saurios hay en los cuerpos de agua era una información primordial en esta circunstancia de crisis hídrica, porque obliga a actuar con inmediatez.
Sánchez Gallardo explicó que es algo preocupante, porque el animal saldrá en busca de agua, de humedad, prácticamente huyendo de zonas secas, además de que las hembras están en etapa de anidación y eso las vuelve más hostiles.
Detalló que cada una pone aproximadamente 80 huevos y se calcula que la mitad son devorados por los propios lagartos machos cuando no tienen qué comer. Agregó que hay mucha sobrepoblación por la falta de control de la natalidad y la ausencia de un depredador que los regule naturalmente.
“Las colonias aledañas a lagunas deben tener mucha precaución, que por favor Protección Civil tenga un acercamiento y les advierta a las familias que tengan mucho cuidado, especialmente los niños, que no miden el peligro, es una amenaza real y debe prevenirse, porque se puede salir de control”.
Suspenden jornadas de limpieza
La agrupación Nutrias con Causa suele llevar a cabo jornadas de limpieza de lirio y basura en los cuerpos de agua y sus alrededores, pero ante la emergencia que se está viviendo decidieron suspender sus actividades dado el riesgo que implica para los voluntarios.
“Nosotros nos arriesgamos al andar escarbando con palas; el cocodrilo macho trata de buscar agua, las hembras ¿qué hacen?, pues proteger con garras y dientes sus nidos porque ahí están sus crías y nos preocupa que se vaya a suscitar algún ataque de saurios contra humanos, es lo que menos queremos”.
El grupo efectúa sus jornadas de limpieza con una logística que incluye desde el monitoreo y ubicación de los nidos de cocodrilos, presencia de paramédicos y mucha seguridad en general para no exponer a nadie.
“La familia pescadora es quien acerca el lirio para poderlo retirar, con remos, para facilitar el trabajo de los voluntarios, que sea más práctico”, mencionó la activista que encabeza estos programas.
SJHN