Ante los casos de violencia contra la mujer y los feminicidios que se han presentado en los últimos meses, el Arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López, pidió a la comunidad denunciar a tiempo cualquier agresión física contra este sector de la población.
En entrevista, monseñor aseguró que la cultura de la denuncia ha ido incrementando en los últimos años, por ello se mostró optimista de que el problema pueda ser detectado a tiempo para que las mujeres ya no sean víctimas de violencia.
"Vamos creciendo y ojalá se siga creciendo la cultura de la denuncia y también de la información a las autoridades, si no hay esto es imposible establecer el orden y la justicia en nuestra sociedad, siempre que una mujer sea lastimada y con mayor razón cuando ocurre un asesinato, la autoridad tiene que actuar porque jamás se puede aprovechar nadie de la debilidad física de otra persona", dijo.
Dado que recientemente se ha tipificado como tal el Feminicidio, Cabrera López confió en que las autoridades apliquen los protocolos de manera adecuada ya que este tipo de problemas se han presentado desde siempre.
"Creo yo que ya han llegado situaciones escandalosas cómo hacer 20 o 25 años, creo yo que ya es tiempo de que hayan aprendido a hacer y atender esta situación", refirió.
Ve positivo ordenar sacerdote a ex recluso
En otro orden de ideas, Rogelio Cabrera López, Arzobispo de Monterrey, vio de manera positiva el ordenar sacerdote a un recluso del Penal de Apodaca.
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En su explicación de motivos, el prelado sostuvo que Gabirel ha obtenido satisfactoriamente una reinserción social y que dicha situación lo llevó a hacer un alto en su vida y repensar las cosas para convertirse en un elemento más de la Arquidiócesis de Monterrey.
"El día de ayer, a petición de Gabirel, lo ordené sacerdote en el Cereso de Apodaca, él lo pidió porque él tuvo una experiencia siendo joven de haber sido detenido en una cárcel y él considera que en ese evento, aunque negativo, el descubrió cosas positivas de la gente que le rodea pero también le hizo tener un alto en la vida y repensar sus proyectos.
"Fue una petición suya que yo acepté y gracias a Dios quiero aprovechar para agradecer a las autoridades del penal, al gobernador, a las autoridades inmediatas que nos dieron todas las facilidades para que pudiéramos entrar a la celebración", concluyó.
Por el momento, aclaró, no hay más reclusos y ex reclusos que estén interesados en ser sacerdotes.