Familiares y amigos de Diego Alejandro, joven que falleció dentro de una secundaria en el municipio de Los Reyes La Paz, realizaron una manifestación afuera de las instalaciones de la institución en la colonia Floresta para exigir justicia y esclarecimiento del caso.
El adolescente falleció el 12 de diciembre durante un convivio organizado por personal educativo de la Escuela Secundaria Técnica 52 “Gerardo Murillo Conrado” con motivo del fin de año, sin embargo, hasta el momento se desconocen las razones del deceso.
Personal de la escuela fue notificaron a los padres del fallecimiento del menor
Los padres del menor aseguran que el día de los hechos, fueron notificados por personal de la escuela sobre la muerte de Diego. Sin darles explicaciones de lo ocurrido les pidieron que acudieran a las instalaciones y personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) inició las investigaciones correspondientes.
Aparentemente la autopsia de ley que le fue realizada al cuerpo arrojó que, Diego Alejandro murió a causa de un traumatismo cráneo encefálico, por lo que los padres solicitaron a los profesores y a la subdirectora identificada como
Silvia Aguilar que, entreguen la evidencia en video de las cámaras de videovigilancia qué hay en el patio donde falleció el menor para esclarecer su muerte, pero aseguran, no hay respuesta.
“Ya se está haciendo el proceso legal, pero queremos que las autoridades escolares nos den la cara que muestren las cámaras, porque dicen que no sirven, hay cámaras adentro del plantel”, dijo Noemí Gómez, madre del menor.
Los dejaron encerrados y sin explicación
Durante la protesta realizada este 17 de diciembre, los padres del menor y dos de sus tíos, solicitaron ingresar al plantel para entablar diálogo con la subdirectora y que les fueran entregados los documentos de su hijo.
Pese a que no les negaron el acceso, la familia fue abandonada dentro del plantel y durante más de una hora permanecieron encerrados.
A través de redes sociales, César Iván Ramos, padre del menor mostró las puertas de la escuela cerradas mientras ellos permanecían en el patio donde su hijo falleció, por lo que hizo un llamado a las autoridades.
“Veníamos a hablar pacíficamente con la subdirectora porque no tienen director en este plantel.”
“¿Por qué se fueron, por qué huyeron, por qué nos dejaron encerrados, por qué nos privan de nuestra libertad y por qué no quieren que alcemos la voz, no se murió un perro, era mi hijo y queremos justicia”, exigió.
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