Después que el Senado omitió hacer un exhorto al gobierno para buscar soluciones a la sobrepoblación de cocodrilos que pone en riesgo a las familias del sur de Tamaulipas así como al turismo, ambientalistas llaman a los legisladores federales a retomar el tema en el Congreso de la Unión.
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Activistas demandan legislar con prioridad una vez instalados en sus curules y escaños, para analizar, evaluar y modificar en su caso, la norma ambiental que ata de manos para actuar ante esa especie protegida.
El reptil está catalogado dentro de la Norma Oficial Mexicana NOM-059-Semarnat 2010, en la categoría de especie sujeta a protección especial, designación que refleja el reconocimiento de su importancia ecológica y la necesidad de medidas especiales para garantizar su preservación en los ecosistemas mexicanos.
“De no haber algunos ajustes de la norma no se va a poder hacer nada, el problema no se va a resolver y por el contrario seguirá creciendo sin control, hay que estar conscientes de ello”, señaló Roque Montiel Lozano, de Ciudadanos Conscientes en Acción por México.
Explicó que al ser una especie protegida, se limita mucho al gobierno en la toma de decisiones, por lo que es tarea, dijo, de diputados y senadores entrantes, hacer lo necesarios en la norma y emitir exhortos para que la búsqueda de soluciones no se estanque.
“Diputados federales y senadores entrantes, aún cuando es un tema muy de la zona, deben voltear a verlo e incluirlo en su agenda de prioridades ahora que lleguen a las cámaras, lo que urge es hacer los ajustes necesarios, desde luego sin afectar la especie, buscar una solución sustentable y favorable para todos”.
Montiel Lozano apuntó que los planes del gobierno estatal pueden quedar en buenas intenciones si no se actúa al respecto y se da un acompañamiento desde su trinchera.
Como se recordará, el Senado envió al archivo un punto de acuerdo que buscaba exhortar a los tres niveles de gobierno a intervenir ante el crecimiento exponencial de la población de cocodrilos en Tampico y evitar un riesgo a habitantes y turistas.
La propuesta advertía que también está en riesgo la reputación del destino turístico ante esta amenaza real, por lo que se pedía exhortar a Semarnat, a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente del gobierno estatal y al ayuntamiento de Tampico a tomar cartas en el asunto.
Fue la senadora tampiqueña Guadalupe Covarrubias Cervantes quien presentó el punto de acuerdo el pasado 14 de febrero, dentro del último periodo ordinario de sesiones de la Cámara Alta y se turnó a las comisiones de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático.
Se demandaba actualizar, elaborar y ejecutar programas y acciones destinados al control, vigilancia y reubicación de la población de cocodrilos en la Laguna del Carpintero con la finalidad de prevenir su crecimiento exponencial y salvaguardar la integridad y seguridad de los habitantes.
La petición fue archivada porque conforme al numeral 5 del artículo 277 del Reglamento del Senado, “las proposiciones con punto de acuerdo que no sean dictaminadas dentro del periodo ordinario de sesiones en el que fueron presentadas, se tendrán por concluidas, cumpliéndose con los trámites de su proceso legislativo y se descargarán de los turnos correspondientes, y sus expedientes serán remitidos al Archivo Histórico y Memoria Legislativa para su resguardo”.