En Altamira abunda la pobreza entre la población y sin embargo siguen los derroches por parte de Armando Martínez Manríquez en la administración municipal, al grado de gastar en un concierto de La Trakalosa cuando hay familias padeciendo hambre, señaló el abogado Pedro Zaleta.
Y es que de acuerdo con el propio Plan Municipal de Desarrollo, el 37.8% de la población altamirense vive en pobreza y el 4.1% en pobreza extrema.
Además, 15.8% de los habitantes presentan carencias por acceso a los servicios de salud, 8.6% no tienen espacios de vivienda, 10.2% no cuentan con servicios en la misma y 25.8% de la población batalla para alimentarse.
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“Es evidente que abunda la pobreza en Altamira, al grado que una cuarta parte de la población batalle para comer y ahí es donde deberían enfocarse los esfuerzos y los recursos económicos de la administración municipal”, expresó Zaleta Alonso.
El litigante, quien ha señalado los excesos del actual trienio, considera que el aniversario de la fundación de Altamira debió ser un evento sobrio y austero pero se convirtió en un motivo de derroche de recursos públicos de Armando Martínez Manríquez porque lo hizo un festejo familiar, al cumplir su progenitora el mismo día.
También en el Plan Municipal de Desarrollo, Martínez Manríquez expuso que “los recursos públicos serán aplicados con sobriedad. Evitaremos el dispendio”.
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Sin embargo, en la conmemoración del 273 aniversario de la ciudad industrial, se ofreció un concierto del grupo La Firma y la banda La Trakalosa en la Unidad Deportiva.
“Nuestro municipio tiene muchas familias pasando pobreza y hambre, sin embargo, Armando Martínez derrocha recursos públicos en la presentación de conciertos que si bien le dan momentos de esparcimiento a la población, no resuelven sus problemas y es hasta ofensivo”, apuntó.
Refirió que no son grupos musicales que cobren poco y se podrá argumentar cualquier cosa, pero siendo Altamira una ciudad con tanta pobreza, no se valen esos despilfarros de dinero público que debe utilizarse para atender necesidades sociales.