El mural Mujeres Luchadoras, Historias de una Palabra, de Said Dokins, adquiere vida propia sobre una base negra, trabajada con diversos y vivos colores, con el que conmemorará el Día Internacional de la Mujer; en esta obra, el autor busca plasmar la lucha constante de las muchas mujeres que cada día dejan un poco de su vida en la Central de Abasto.
En entrevista, el artista visual explicó que en México falta reconocimiento al trabajo que realizan las artistas mexicanas, por lo que desde su organización Dokins, dedicada a visibilizar a artistas que no son reconocidos en el ámbito cultural, se trabaja en la participación de las mujeres en el arte urbano.
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“Hay muy poca participación de las mujeres, esto se debe a las ideas que se tiene del arte urbano, del graffiti, las cuales están más vinculadas con lo masculino, por la idea de salir de noche, de atreverse a hablar sobre algún tema y las ideas de ser intrépidos, que se vinculan más con lo masculino, cuando en realidad sabemos que las mujeres tienen capacidades de todo tipo”, expresó.
Señaló que “en la herencia del graffiti, que ha sido muy masculina, la labor de la mujer ha sido doble, en primera por ser reconocidas en el gremio, y en segunda, por las cuestiones familiares y sociales que limitan su participación”.
Dokins explicó que hay más hombres artistas en los museos, sin embargo, el tema de representación siempre es hacia lo femenino; además, el trabajo de las artistas no es tan visible, por lo que busca promoverlo; dijo que por eso se integró a la campaña He For She, que integra hombres a la lucha por la equidad.
Detalló que el mural, que espera concluir antes de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, pretende plasmar las historias de algunas luchadoras sociales, pero también de las mujeres que trabajan en la Central de Abasto.
El dato:Para realizar el mural se han usado 10 cubetas de 20 litros de pintura.También se usará aerosol, especialmente en plateado, galones de pintura dorada.
En tanto, la cofundadora de Central de Muros, Irma Macedo, dijo que la organización ha intervenido unos 66 muros en esa central, entre 16 y 17 de ellos los han realizado mujeres.
Expuso que en el país existen muralistas muy buenas, sin embargo, el trabajo en las calles implica enfrentar cuestionamientos referentes a sus intervenciones artísticas: “No son tantas las mujeres que participan en el muralismo, aunque ahora que ya es más aceptado y no tan perseguido, cada vez hay más”.
Central de Muros, que desde hace dos años interviene con arte urbano la Central de Abasto, está conformada por tres mujeres, y busca llamar la atención para pasar de la protesta a la propuesta mediante el arte, quieren evidenciar los problemas de cambio climático, equidad de género y migración, por mencionar algunos. Dijo que se trata de generar un diálogo con manifestaciones artísticas.
En su oportunidad, la oficial nacional de información de (ONU) México, Mariana Castro, explicó que el Centro de Información de las Naciones Unidas colabora con Central de Muros desde hace un año: “Es nuestro brazo estratégico para llegar a todas las personas que se pueda con los objetivos de desarrollo sostenible, que es la Agenda 20/30”.
Explicó que el trabajo con Central de Muros pretende ofrecer oportunidades para que los artistas propongan nuevas ideas en la manera de expresar los objetivos de dicha agenda.
Las mujeres deben vencer poco a poco las barreras de género; en este caso, los murales generan reflexiones que podrían desembocar en acciones. Central de Muros intenta demostrar que mediante el arte urbano se puede llegar a más personas; además, puntualizó la importancia de inspirar a otras mujeres y lograr empoderamiento femenino, y en este caso, mediante el color y el arte.
EB