En la Guía para que tu entorno sea un lugar seguro y protector para tus hijos elaborada y publicada por Aldeas Infantiles SOS México, se encuentra información relevante sobre cómo construir un lugar donde adultos, niños y adolescentes se sientan importantes, valorados y queridos.
Su objetivo es orientar a padres de familia sobre el derecho vital para los niños, adolescentes y jóvenes a desarrollarse en ambientes donde se les brinde y asegure protección; así como espacios que les permitan crecer de manera integral, en los que se contemplen sus particularidades y se atiendan sus necesidades primarias y secundarias, señaló Diana Rosales Espinosa, directora ejecutiva de Aldeas Infantiles SOS.
La guía puede descargarse en formato PDF de manera gratuita aquí; además se pueden hallar otros materiales que la organización ha elaborado en favor del cuidado y protección de los niños y adolescentes.
“En esta guía se abordará la importancia de fomentar el apego seguro con los hijos e hijas, porque esta es la garantía para que tengan una infancia feliz y una adultez sana”, subrayó Diana Rosales.
Los padres de familia cumplen un papel fundamental en la crianza y educación de sus hijos: “Esto sin duda es una gran responsabilidad y representa un desafío para el que nadie está preparado”.
Por ello, Efraín Guzmán García, coordinador nacional de protección infantil en Aldeas Infantiles SOS, anticipó que para crear un entorno seguro y protector es muy importante que tanto padres e hijos se sientan libres de mostrarse tal cual son, construyan lazos afectivos basados en la comunicación, confianza y respeto, tomen decisiones en conjunto, establezcan normas y reglas de convivencia.
Los estudios científicos y la práctica clínica indican que aquellos bebés y niños con figuras de apego y han cubierto sus necesidades, son más seguros de sí mismos, más autónomos y tienen una buena capacidad de resolución de conflictos.
Todos los seres humanos tienen la necesidad de establecer vínculos con las personas de su entorno porque un vínculo afectivo positivo proporciona estabilidad emocional y seguridad.
En el caso de los niños, esto solo es posible si los adultos responsables de su cuidado garantizan un entorno protector en todos los espacios de crianza y convivencia. El desarrollo pleno de una persona, a nivel humano y profesional, se puede lograr si se crece y convive en entornos seguros, protectores y afectivos.
JLMR