Especialistas plantean un proyecto para reubicar el sistema de diques y ya no batallar con la infraestructura de 22 kilómetros construida hace 72 años en El Camalote.
El Colegio Mexicano de Ingenieros y Arquitectos (CMIA), sugiere también crear un Instituto del Agua con la participación de expertos en temas hídricos, para generar soluciones a esta y otras problemáticas que se arrastran.
El presidente, Rafael Benavides Osorio, explicó que el proyecto del ingeniero Alfonso Uribe busca instalar el dique principal a la altura del Moralillo.
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Expuso que El Camalote es un estero que forma parte del sistema lagunario del río Tamesí, principal fuente de abastecimiento de agua potable para cerca de un millón de habitantes del sur de Tamaulipas.
Sin embargo, debido a las condiciones de la estructura de contención se registran fugas de agua dulce, y cuando el nivel del mar sube, hay filtraciones de agua salada. Esto último ocurrió e hizo crisis el año pasado, cuando la salinidad llegó a los miles de hogares, estando latente el riesgo de volverse a presentar en cualquier momento.
“Aquí en nuestra zona se ha construido una serie de diques que constituyen propiamente una presa que permite almacenar el agua dulce en cantidades que no suceden allá en la zona de Las Adjuntas y que el agua llega directamente a los humedales”
Refirió que esa área de diques tiene una longitud de 22 kilómetros y en algunos puntos los espigones están rotos; a veces porque los mismos pescadores de la comunidad los rompen para que el agua y los peces pasen.
“El ingeniero Uribe, que cuenta con una gran experiencia en temas hídricos, se concentra precisamente en ese punto de que la longitud de los diques es muy grande, por decirlo así, comparado con lo que normalmente es una presa, y por lo tanto requiere un mantenimiento muy costoso”.
Benavides Osorio subraya, ¿por qué no construir unos nuevos diques pero en una zona cercana al Moralillo donde desfoga una parte del Tamesí al Pánuco?
Detalla que el sitio sugerido es cruzando el río Tamesí, adelante del puente Moralillo, zona que se divida a su vez en dos cauces más angostos.
“Su propuesta es construir ahí ese dique que abarcaría como 150 ó 200 metros según los datos que arrojan sus investigaciones; sustituir prácticamente la longitud actual de diques”.
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El aumentar el área de embalse implicaría, agrega, que una laguna relacionada con esa parte del río y que actualmente es agua salobre, se convirtiera en dulce, por lo que hay que buscar proteger también la flora y la fauna.
Destaca que una de las principales ventajas del proyecto es que la longitud de los diques sería muy corta, pero además se dejaría parte de los que están más directo conectados con Comapa.
“Se cerraría ahí y el resto allá donde el agua se fuga dejarían de funcionar, esa es en forma resumida la propuesta que necesita un estudio detallado de impacto ambiental y reubicar la fauna que pudiera verse afectada”.
Rafael Benavides comenta que el plan sugerido lo ve favorable porque es menor el trayecto que se deba vigilar y controlar, pero sobre todo porque se pueden evitar las fugas.
“Incluso queremos formar un grupo, un Instituto del Agua y buscamos la forma de contar ya con una personalidad jurídica para impulsar ese tipo de proyectos y ofrecer soluciones a problemas que se arrastran”.
Problema social sin resolver
El director de la Casa de la Naturaleza, José Luis León Hurtado precisa que el sistema de diques, vertederos y esclusas del Sistema Lagunario Río Tamesí consta de 22 kilómetros de longitud y es infraestructura de los años 50, que no se le dio la atención necesaria.
“Parece mentira pero es un retorno hídrico, cada 10 ó 15 años pasa lo mismo, se arreglan los diques y luego otra vez el mismo problema”, enfatiza.
Añadió que en el barrote del Camalote hay entre 50 y 60 familias que habitan en los alrededores desde antes que se hicieran los diques y han promovido demandas por daños a sus tierras.
“No han recibido la indemnización a la que tienen derecho, hay que negociar con ellos, además son pobladores del estado de Veracruz, no de Tamaulipas, eso complica más las cosas, las autoridades de aquel estado no han sido tomadas en cuenta”.
Focos de riesgo
Colonos de la Ampliación Los Pinos urgen apoyo del ayuntamiento de Ciudad Madero, pues con la época de lluvias viven entre el riesgo de encontrarse un lagarto y la constante presencia de aguas negras que se mezclan con los encharcamientos causados por precipitaciones pluviales.
Vecinos representados por José de Jesús Rojano Rodríguez pidieron ayuda del alcalde Adrián Oseguera Kernion ante esta problemática que les afecta en la actual temporada.
SJHN