Mi trabajo es una bendición: Toño, restaurador de Niños Dios, con más de 60 años de experiencia

Entre figuras, pinturas y horas de trabajo, es como Toño retoca, crea y restaura las imágenes del Niño Dios que llegan a sus manos.

Toño, restaurador de figuras religiosas. (Foto: Hernán Cortés)
Ciudad de México /

Antonio Zárate Martínez, un hombre de 79 años de edad, que desde niño se ha dedicado a la artesanía de artículos religiosos, año con año se establece en calles de la Ciudad de México para realizar trabajos previos a la celebración del 2 de febrero. 

Entre figuras, pinturas y horas de trabajo, es como Toño -como es llamado por familiares y conocidos- retoca, crea y restaura las imágenes del Niño Dios que llegan a sus manos.

Restaurador de imágenes religiosas. (Foto: Especial)

Toño narra que su abuelo y padre se dedicaban al mismo oficio, por lo que él nació entre las figuras y pinturas religiosas, siendo así que a una temprana edad, inició en este "noble trabajo" como él lo llama.

"Era el trabajo de mi padre, y a mi padre le enseñó mi abueño. Yo nací entre las pinturas y todo. Es un trabajo muy noble y muy humilde, y gracias a Dios con esto mis hijas son profesonistas y terminaron su carrera, y nos ha dado para vivir. Mi trabajo es una bendición", comentó. 
Restauración de Niños Dios en Ciudad de México. (Foto: Especial)

"Aquí está Toño"

Tras años de estar con su padre y abuelo, Toño estableció su propio negocio, y con ello sus hijas comenzaron a apoyarlo, pues la demanda del trabajo comenzó a incrementarse.

De esta forma fue como el nombre del negocio tomo popularidad entre su clientes y la zona, y así llegó "Aquí está Toño".

"Mis hijas saben hacer todo, pero ya nos dividimos, nos separamos. Una hija vende manitas, otra hace las piernitas, y la otra vende la figura del Niño Dios ya pintada", explicó.

Durante la temporada de febrero, Toño asegura que el trabajo incrementa por lo que sus horarios se extienden para poder cumplir con todos sus clientes.

"Dejamos de trabajar hasta que el cuerpo aguante. Hay veces que nos queda mucha mercancía. En estos días dejamos de trabajar a la una o dos de la mañana, y a las siete la gente ya está te está buscando", dijo.
Restaurador de Niños Dios en Ciudad de México. (Foto: Hernán Cortés)

Finalmente, Toño invitó a las personas a acudir a su taller que se encuentra ubicado en avenida Tepozanes, número 350, Nezahualcóyotl

"Ahí nos pueden encontrar, muchas personas, incluso padres me van a buscar. 
"Hay muchas gente que busca que se les haga un trabajito y aquí estamos. Y gracias a este trabajo hemos logrado lo que se tiene en la casa y los estudios de mis hijas, y eso me da mucha satisfacción", dijo.


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  • Hernán Cortés
  • hernan.cortes@milenio.com
  • Editor web de Ciudad de México. Egresado de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

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