Restaurantero pasa del temor al éxito tras pandemia del covid-19 en Monterrey

Fabio Ficara utilizó la pandemia como una herramienta para corregir sus procesos y explorar áreas de oportunidad para mejorar.

Fabio Ficara obtuvo lecciones de la pandemia. Especial
Édgar Plata
Monterrey, Nuevo León /

Con la llegada del covid-19 a México y las medidas de cierres y confinamiento, muchos negocios y restaurantes se vieron en la necesidad de cerrar sus puertas, ya sea parcial o permanentemente, pero a cuatro años de la pandemia hay muchos establecimientos que sí pudieron superar esa dura etapa.

El equipo de Telediario visitó a Fabio Ficara, restaurantero del sur de Monterrey que se dedica a la venta de pizzas y comida rápida tipo italiana.

Hace cuatro años, Ficara tenía su local en San Pedro Garza García, sin embargo, con la llegada de la pandemia y otros problemas se vio en la necesidad de cerrar su restaurante.

Sin embargo, utilizó la pandemia como una herramienta para corregir sus procesos y explorar áreas de oportunidad para mejorar en futuros proyectos.

“Esto me ayudó en ver lo que hacía falta, lo que estaba fallando, lo que faltaba aquí para la organización. La pandemia fue un drama, pero también fue una ayuda en mi caso para verificar que esto pudiera funcionar”, comentó Ficara.

Al igual que muchas personas, el hombre se contagió de coronavirus, lo que le provocó un miedo intenso de que su negocio se fuera a la quiebra.

“Muchas empresas fueron completamente destrozadas y yo me desanimaba porque dije: ‘Imagínate yo que estoy aquí sin abrir y nadie me conoce y los poquitos si me hablaban les decía que no podía porque estaba enfermo’”, entonces pensé que esto se iba a morir.

Tras la pandemia, una de las preocupaciones era nuevamente tener clientela, pues las normas en ese entonces no permitían acudir presencialmente a los establecimientos, pero la publicidad de boca en boca, ayudó a que su negocio pudiera renacer.

“¿De dónde voy a sacar para mantener el local? Lo sacaba del sabor, créanme que esto funcionó simplemente porque quien probaba luego le decía a otra persona: ‘Pruébalo, ayúdalo, porque necesita, como cualquier pequeño negocio, necesita de la clientela’, y a mí me salvaron con el boca a boca”, recordó.

Para Ficara, la pasión es el ingrediente principal de su negocio pues tras las complicaciones de la pandemia, el amor por la comida italiana fue su bastón para ser un caso de éxito postpandemia.

nrm

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