Rudy Carpinteyro, el tehuacanero que ayudó a damnificados en Turquía

Rudy Carpinteyro estuvo por cinco días en Hatay y Karrabasnara Turquía, para sumarse a los voluntarios que fueron llegando después del sismo.

Tehuacanero que ayudó a damnificados en Turquía | Especial
Apolonia Amayo
Ciudad de México /

Ropa de niños, bicicletas y juguetes, cuadros de fotografías que colgaban entre escombros, llantos desgarradores de madres de familia que buscaban a sus hijos o que los encontraban sin vida después de haberlos sacado de las toneladas de escombros a los cuales se redujeron edificios de 15 o 20 pisos, fue lo que más conmovió al tehuacanero Rudy Carpinteyro, quien por cinco días estuvo en Hatay y Karrabasnara Turquía, para sumarse a los voluntarios que fueron llegando después del sismo que sacudió a varias ciudades de ese país.

Tehuacanero ayudó a damnificados en Turquía | Especial

Estaba en España y se disponía a volar a Marruecos, pero al darse cuenta de la magnitud de la tragedia, revisó la disponibilidad de vuelos, llegó a Estambul y de ahí llegó a Karrabasnara, una de las zonas más afectadas observó como una familia trataba de rescatar a familiares, se acercó y ayudó, pero era imposible llegar a ellos, había trabas de muchas toneladas que difícilmente podían remover, porque en los primeros días de la tragedia casi no había voluntarios, ejército, rescatistas, llegaron después.

Para sumarse a la ayuda, rentó un automóvil y comenzó a apoyar en el traslado de las personas quienes a pesar de no entender el inglés, porque solo hablan el turco, Rudy apoyándose en jóvenes, comenzó a ayudarles en su traslado con señas, porque querían saber de sus familiares que vivían o trabajaban en lugares distantes, otros más querían abandonar la ciudad y se dirigían a las terminales de autobuses.

Tehuacanero que ayudó a damnificados en Turquía | Especial

En sus recorridos por las calles, observó los edificios destruidos y a punto de colapsarse.

En otros días ayudaba a servir comida a las personas de esa ciudad, a los rescatistas, los voluntarios son parte importante, porque mucha de la gente que vive en Karrabasnara, está en shock, otros lloran, no les importa comer, unos más buscan a sus familiares, quieren ver al menos su cadáver.

Por eso también se integraba a los trabajos de rescate de personas, para llegar a ellos era difícil porque había una y otra capa de cemento, “pero hay que quitar piedras, trozos de construcción para alentar a las personas en la búsqueda de su gente, recuerdo que me encontré un caso donde en un edificio murieron siete familias”.

“Estaba impresionado por la magnitud de la tragedia, por el dolor de la gente que permanecía en las calles, esperaba encontrar a su familiar, lo hacía desde este lugar a pesar de que las temperaturas llegaban a menos 13 grados, para superar este frio, hacían fogatas quemando muebles que había en los lugares destruidos”.

Tehuacanero que ayudó a damnificados en Turquía | Especial

El rescate


En los primeros días, los cuerpos que eran encontrados, los colocaban en bolsas selladas y en ataúdes de madera, las subían en vehículos como ambulancias que tenían cuatro compartimientos; después, cuando comenzaban a encontrar más cadáveres, los rescataban y colocaban en la calle envueltos en sábanas y cobertores, en cajas que eran recogidas en camionetas recogiendo los cadáveres de quienes no estaban sus familiares, porque quizás también fallecieron.

AAC

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.