Fe, esperanza y pagar una manda que se prometió por un favor recibido por la Virgen de San Juan de los Lagos, es la motivación para un grupo de personas que con tal de cumplir con lo pactado no les importa caminar aproximadamente un mes desde la basílica de Ciudad de México, hasta el municipio jalisciense.
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Con 22 etapas y visitando los distintos estados a su paso, también con sus respectivos descansos, es como viven este largo camino que comprende los 452.3 km de distancia.
“Pues si como se da cuenta algunos venimos a pagar una manda algunos por un favor ya recibido, cualquier cosa, pero si es el grupo con catedral”, detalló Martín Tapia, peregrino de la CDMX
De la Ciudad de México salen del 7 de enero y es un promedio de 29 días caminando, dos ascensos y dos descansos, también otro ascenso en el Cerro de la Mesa y ascenso al Cubilete, dos descansos en la ciudad de Querétaro y en la ciudad de León.
Pareciera que el cansancio, las noches frías, dormir acampando y correr el riesgo de caminar a orillas de la carretera no les importará a estos peregrinos de las distintas edades, desde niños hasta personas de la tercera edad.
“Ha sido muy bonito pues seguimos remarcando nuestros pasos para encontrarnos con María Santísima de San Juan en este grupo que tiene ya su historia propia de que camina firme en esta marcha peregrina. No nos impide hacer el viaje, venimos con un protocolo de sanitización somos responsables al final de cuentas y nuestra fe es la que nos lleva a María”, señaló Eduardo Hernández, peregrino de CDMX.
Así es como a pesar de las medidas restrictivas y sabiendo que la basílica se encontraría cerrada, los devotos de esta divina imagen viven el Día de la Candelaria a típicamente este 2022.
MC