En México varias ciudades tienen la costumbre de adoptar a una figura Santa, para que pueda proteger y bendecir a los ciudadanos de la misma.
En León seguramente hemos escuchado hablar de San Sebastián, mismo que es considerado en León como patrono de la ciudad, esto como forma religiosa para los católicos.
San Sebastián en la mayoría de las veces es representado como un mártir, atado a un poste y con flechas atravesando su cuerpo, esto debido a que fue así como él sufrió ante el emperador de Roma Maximiliano.
Todo comenzó desde que Sebastián decidió unirse al ejército romano de occidente, está opción por qué quería seguir los pasos de su padre quien también había sido un militar.
Al ingresar al ejército de inmediato mostró grandes habilidades y liderazgo, lo que permitió que pronto se convirtiera en un capitán de la primera corte de la guardia pretoriana lo cual hizo que varios de sus compañeros tuvieran celos de su posición.
Para este punto se conocía entre algunos soldados que Sebastián era cristiano, por lo que servía a Roma, pero también a Dios y eso hacía que tuviera un mejor corazón y ayudará a los más necesitados.
Tiempo después Maximiliano decidió eliminar de su gobierno a todos los soldados que fueran cristianos, por lo que se le indicó que Sebastián era uno de ellos, al conocer esto el Emperador se sintió traicionado y condenó a muerte a Sebastián sin ninguna compasión, por lo que buscó la forma más cruel de acabar con su vida, la cual fue amarrarlo a un poste de pies y manos y pedirles a sus arqueros que lanzarán flechas hacia él.
Al acto llegaron seguidores de Sebastián y recogieron su cuerpo el cuál seguía vivo a pesar de las heridas, le dieron asilo y curaron su cuerpo, el cual logró recuperarse sorprendentemente.
Con el paso de los días San Sebastián fue a enfrentar a Maximiliano quien se sorprendió al ver que estaba vivo.
Pronto llamó a sus soldados quienes recibieron la orden de terminar con su vida.
Fue así que San Sebastián perdió la vida y se ganó el respeto y reconocimiento de sus seguidores quienes lo nombraron Santo.