En la actualidad las mascotas son parte fundamental de los núcleos familiares, pues si bien, a lo largo de las últimas décadas los animales de compañía son considerados “los mejores amigos del hombre”, la realidad es que se han convertido en un integrante más. En particular para los adultos jóvenes, pues ahora se está reemplazando la crianza de hijos por la de perros o incuso plantas.
Sin embargo, la llegada de un ‘lomito’ al hogar se puede traducir en desenlaces fatales. Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que en México cerca del 70 por ciento de los perros encuentran en situación de abandono callejero, es decir, más de 16 millones del total, cifra totalmente alarmante.
Además, la problemática aumentó 15 por ciento durante la pandemia por covid-19, esto son contemplar los incrementos tras las fiestas decembrinas, época del año en que ollas mascotas se convierten en regalos, pero que una vez deja la etapa de cachorros, se vuelven poco atractivas y son echados.
Por ello, existen decenas de refugios que se dedican al rescate y cuidado, al igual que personas de la sociedad civil que realizan campañas de difusión a través de diferentes medios para conseguir un hogar para los peludos amigos, teniendo como ejemplo el siguiente caso.
Santy, perro Chihuahua, está en búsqueda de un hogar
A través de Facebook, la plataforma de rescatistas independientes “Adopta un Ángel”, cuya misión es encontrar un hogar para los perros que cuidan temporalmente tras salvarlos de la calle, publicó la historia de Santy, un perro Chihuahua.
De acuerdo con la información proporcionada, Santy se convirtió en perro callejero luego de que fuera expulsado de su hogar. Lo anterior significó inexperiencia en la vida salvaje, pues al ser chihuahua de casa, tuvo que aprender a buscar comida y refugiarse del cambiante clima.
“No tenía experiencia en la calle, realmente soy muy ingenuo, me refugiaba debajo de los carros para protegerme de la lluvia y frío”
Esa inexperiencia lo llevó a ser víctima de un atropello, en el que quedó inconsciente y herido del cuello. Ante esto, fue rescatado y llevado al veterinario, donde sobrevivió.
“No morí, estoy vivo y listo para que me adoptes”.
Santy es un chihuahua de aproximadamente año y medio de edad, que sería entregado a sus nuevos dueños desparasitado, vacunado y esterilizado. Lo que busca la fundación es una familia responsable y comprometida, que tenga paciencia y tolerancia para educarlo con amor y respeto.
La opción más viable es que se una familia habitante de la CdMx, pues es donde Santy y su rescatista se encuentran. En caso de que desees adoptarlo, debes llenar éste formulario e iniciar el proceso.
FM