Dos de cada tres personas que ganan el salario mínimo en Estados Unidos, son mujeres. Aunque 29 estados y el distrito de Columbia actualmente tienen salarios mínimos por encima del nivel federal establecido, la mayoría de los estados todavía tienen salarios que dejan a los trabajadores luchando para llegar a fin de mes, incluso cuando laboran a tiempo completo.
Un informe de National Women's Law Center indica cuáles son los estados de la Unión Americana donde hay más mujeres que ganan el mínimo. En sólo un estado, las mujeres representan menos de la mitad de la fuerza laboral peor pagada.
Los peor pagados
Once estados tienen la mayor concentración de mujeres que ganan el mínimo. Éstos son: Idaho, Wyoming, South Dakota, Nebraska, Indiana, Alabama, Georgia, Missouri, Louisiana, Pennsylvania y Delaware, donde el 70 por ciento de quienes ganan el mínimo son mujeres.
Luego le siguen Nevada, Nuevo México, Colorado, Kansas, Minnesota, Iowa, Wisconsin, Arkansas, Mississippi, Florida, North Carolina, Ohio, West Virginia, New Jersey, Connecticut, Vermont, New Hampshire, Maine y Rhode Island, con 60 por ciento.
En medio quedan: Washington, Oregon, California, Montana, Arizona, Texas, Oklahoma, Michigan, Illinois, Kentucky, South Carolina, Virginia, Maryland, Washington DC, New York y Massachusetts, con cerca del 50 por ciento.
Los estados que hacen la diferencia
Utah es el único estado con menos mujeres que ganan el salario mínimo. Ahí, menos de la mitad se encuentran en esa condición. Otros estados que se acercan a este estándar son: Alaska, North Dakota y Tennessee.
De acuerdo con National Women's Law Center, aumentar el salario mínimo federal es esencial para ayudar a millones de mujeres trabajadoras en todo el país a mantenerse a sí mismas y a sus familias.
Y debido a que las mujeres son la mayoría de los trabajadores que obtendrían un aumento, aumentar el salario mínimo también ayudaría a cerrar la brecha salarial de género.
En Estados Unidos, el salario mínimo federal es de 7.25 dólares. Sin embargo, 29 estados más Washington DC, aumentaron su salario mínimo desde enero de 2014 para garantizar que sus trabajadores ganen más de lo establecido a nivel federal.