Plaga afecta a 10 mil hectárea de soya y sorgo en Altamira, lo que representa una perdida de por lo menos 8 mil pesos por hectárea que se invirtieron desde la siembra, por lo que productores se declaran en crisis.
José Enríquez Reyes, presidente de la Confederación Nacional Campesina en este municipio, manifestó que en esta cosecha les fue muy mal con el gusano que acaba con el producto y todavía prevén la llegada de la llamada mosca blanca.
Al momento no tienen apoyos de recursos federales y tampoco tienen dinero para invertir en los insecticidas que se utilizan para eliminar el problema, por lo tanto, el riesgo es que se pierdan en su totalidad.
SJHN