Durante la madrugada del miércoles se registró un conato de bronca en las instalaciones de la planta cementera Cruz Azul, después de que en el sitio se presentara una actuaria acompañada por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) para realizar una diligencia.
De acuerdo a integrantes de la autodenominada “La resistencia”, grupo que mantiene el control de la planta ubicada en Ciudad Cooperativa Cruz Azul, a las 3 de la madrugada un grupo de policías estatales arribó a la planta.
Lo anterior para apoyar en una diligencia que, dijeron, tenía como objetivo tomar el control del sitio en favor de la contraparte, conocida como “La disidencia”, grupo encabezado por José Antonio Marín Gutiérrez y Víctor Velázquez, quienes tienen el control de las demás plantas del corporativo en el país.
Los policías estatales acompañaban a una mujer que se presentó en la puerta 1 de la fábrica, argumentando ser actuaria y quien pretendía desarrollar una diligencia en la planta, aunque según los miembros de “La resistencia”, presentó un documento sin validez legal.
Señalaron que ellos cuentan con un amparo federal que impide que se entregue dicha planta, la única que este grupo mantiene en posesión, por lo que desestimaron el documento presentado por la actuaria.
El personal de la planta que se encontraba en guardia impidió que se desarrollara la diligencia para tomar el control de la planta e incluso solicitaron el apoyo de más empleados y habitantes de la localidad, para impedir la acción judicial que pretendía ejecutar la actuaria.
Ante ello la notaria, presuntamente solicitó a los elementos policiacos ingresar y tomar control de la planta, lo que desató una confrontación en la que hubo golpes y se lanzó gas lacrimógeno.
Trabajadores señalaron que los elementos de la policía estatal presuntamente causaron destrozos, no obstante, con apoyo de una maquinaria pesada tipo bulldozer los empleados de la cementera, sus familiares y policías bancarios, replegaron a los policías estatales.
SSPH apoyó diligencia
Por su parte la SSPH confirmó horas después la participación de elementos policiacos en los hechos registrados en la cementera Cruz Azul informando que su intervención se dio en el marco del “ordenamiento de un juez para el desarrollo de una diligencia”.
Esto, de acuerdo a la dependencia, para “dar acompañamiento y medidas de seguridad a un actuario; los oficiales de policía acudieron para resguardar el sector, en tanto se desarrollaban las acciones legales por parte de las autoridades competentes”, e indicó que “al presentarse agresiones las fuerzas estatales se retiraron para evitar confrontación de mayor escala”.
Horas después de los hechos un grupo de “La resistencia” se trasladó a las inmediaciones del Consejo de la Judicatura Federal, en la Ciudad de México, para protestar por la actuación de la diligencia efectuada por la contraparte durante la madrugada, y la cual consideraron ilegal, e incluso solicitaron mesas de diálogo con autoridades de Hidalgo y del gobierno de México para resolver el conflicto.
Por su parte “La disidencia” argumentó que la diligencia derivaba de un mandamiento judicial asistido por la fuerza pública para tomar el control de ese centro de trabajo, agregando que no hay suspensión derivada de un juicio de amparo.
Señaló que ante los hechos violentos decidieron retirarse del lugar, para evitar que hubiera un incidente mayor, aunque se mantiene la intención de continuar con las acciones legales para que la dirigencia de José Antonio Marín y Víctor Velázquez tomen el control de dicha planta.