El Chorro en Tala, balneario natural afectado por derrame de hidrocarburo

En septiembre de 2021, los trabajadores y visitantes del lugar se percataron que el agua olía a gasolina y al tener contacto con ella sentían un sabor desagradable, desde entonces se ha limitado el acceso y se investigan las causas

El agua de esta maravilla natural ya no es apta para el uso, recreación y consumo humano. (Diana Barajas)
Diana Barajas
Guadalajara /

Dentro del balneario El Chorro ubicado en el municipio de Tala se localiza un pequeño río cuya agua ya no es apta para el uso, recreación y consumo humano porque un fluido de hidrocarburos culmina en el cauce del cuerpo de agua.

En septiembre de 2021, los trabajadores y visitantes del lugar se percataron que el agua olía a gasolina y al tener contacto con ella sentían un sabor desagradable.

"Mismos clientes o venían turistas al lugar nos decían que percibían un olor o que salían con algún tipo de aceite impregnado en la piel y decidían retirarse, pero nosotros no teníamos idea de lo que estaba sucediendo", explicó un trabajador del balneario Los Chorros.

En octubre, OPD Bosque de la Primavera, SEMADET y Protección Civil detectaron que había un flujo constante de hidrocarburos que culminaba en el río. Tras más de cuatro meses de monitoreo y vigilancia en la zona no se ha precisado el origen del flujo y por prevención también en octubre se limitó el ingreso de visitantes al balneario.

El balneario El Chorro se compone de áreas verdes, de juegos, de comida, dos cascadas naturales que terminan en este cauce de agua, agua que aparentemente no luce contaminada, pero basta con caminar en las orillas del río para ver de cerca la presencia de hidrocarburos.

Esta es una de las zonas del cauce de agua donde es perceptible el daño ambiental, tanto a la vista como al olfato huele a gasolina y se puede apreciar esta mezcla amarillenta

Los trabajadores refieren que esta mezcla amarillenta se genera por el contacto de los hidrocarburos con el agua y lodo.

El trabajador ha laborado en el balneario durante 16 años, dice sentir tristeza y nostalgia de ver las afectaciones en la fauna y flora causadas por la presencia de hidrocarburos.

"Algunos animales que bajaban a tomar agua a esta parte ya no se han visto. Ya no hay rastro de huellas. Lo que tenemos aquí es el jabalí y en ocasiones nos tocó ver al gato montés y venados.


"Los árboles que están en el cauce del río, a los lados, algunos ya se están secando, de hecho los árboles que están pegados al río ya algunos se cayeron y otros se están secando. Sus raíces no son muy fuertes porque sí les afecta lo que se les pueda estar adhiriendo del combustible", aseguró.

Ni las autoridades, ni los propietarios del balneario tienen certeza de cuántos litros de hidrocarburos se han vertido al río, tampoco de cuánto tiempo llevará encontrar el origen del fluido y resarcir el daño ambiental.

MC

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