Jalisco Talent Land Digital 2021 cerró con varias historias de éxito y muchas en proceso de concretarse a través de los diferentes proyectos que se gestan en este encuentro educativo y tecnológico. Una de ellas es la Adriana Díaz, quien está por finalizar sus estudios de Ingeniería en Telemática en el Instituto Politécnico Nacional y que es una de las mentes detrás del desarrollo de un robot para exploración espacial, mejor conocido como rover.
Díaz es una de 29 especialitas de áreas como mecatrónica, ciencia e ingeniería que trabajan en Quantum Robotics, donde hay estudiantes del Tecnológico de Monterrey y el IPN. Su labor es impulsar el desarrollo de rovers en México y con eso poder competir en diferentes concursos de la especialidad, así como incentivar a que jóvenes estudien carreras tecnológicas.
La ingeniera comenta que “un rover no es tarea sencilla” y que su actual proyecto presenta avances en cuanto a navegación autónoma, enlace de comunicación y mecánica del robot. “Estamos en un muy buen punto en la que estamos realizando diferentes mejoras”, dijo.
Hasta ahora han recibido apoyos y asesorías de empresas pero les faltan más para llevar el proyecto a otras competencias como el University Rover Challenge o el Canadian International Rover Challenge. Esperan retomar esto a partir de 2022.
Los interesados en apoyar este proyecto pueden contactar al equipo en la página web https://qrteam.space/
Me gustaría apoyar a jóvenes a llegar al área tecnológica: Adriana Díaz
Adriana Díaz habla a corazón abierto, agradece todo el apoyo de su madre para seguir estudiando, pero reconoce que buena parte de lo que ha logrado y el momento que vive hoy es gracias a un esfuerzo constante pese a los momentos difíciles.
“A lo largo de todo mi camino he padecido. Sé que muchos les cuesta trabajo poder estudiar una carrera, no tener dinero para ir a la escuela, pese a los obstáculos seguir avanzando sé que es difícil […] A mí me gustaría decir en un futuro que por lo que yo viví poder ayudar a jóvenes a insertarse a un área tecnológica”, compartió.
Adriana se fijó el lugar a donde quería dirigirse profesionalmente, para enfocarse y luego buscar mentores para impulsarse. La joven compartió que pese a que hubo quien no le veía futuro en la ingeniería, supo desechar esos comentarios y encaminarse a su campo de interés, “voy a tomar lo que construye no lo que destruye”, señaló.
Hoy esta joven ingeniera ha podido insertarse profesionalmente pero no olvida que el camino no fue sencillo y quiere ayudar a más jóvenes a encontrar el suyo.
SRN