El primer rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), Federico G. Lugo Molina, uno de los principales precursores del movimiento de autonomía de la máxima casa de estudios en el estado a finales de la década de los sesenta, falleció este sábado por la tarde en la Ciudad de México, informaron familiares. Tenía 80 años de edad.
Originario de Nuevo Laredo y surgido de la Escuela de Comercio en dicho municipio en la ciudad fronteriza, junto a estudiantes lograron el proceso para obtener del gobierno del estado, en aquellos años con Praxedis Balboa como gobernador, el proceso que tardó cerca de un año en completarse.
Esto vino ante la iniciativa de los estudiantes de tener una universidad regida por los propios alumnos y el personal académico. Fue un movimiento que consistió en reuniones con las autoridades estatales y en el Congreso del estado, además de marchas provenientes principalmente de Tampico y de El Mante, que concluyeron en la Plaza Juárez en Ciudad Victoria.
Así, tras el decreto emitido en el Periódico Oficial del Estado el 15 de marzo de 1968, Lugo Molina fue elegido como el primer rector de la institución de nivel superior autónoma, para relevar a Francisco T. Villarreal. En 1972 fue reelecto para un segundo periodo consecutivo que finalizó en 1976, es decir, fungió en el puesto ocho años.
"Se le atribuye ser una pieza importante en lograr que la UAT fuera parte de lo que hoy conocemos, una universidad libre y consolidó el sueño como los deseos de miles de estudiantes que en aquella época lucharon e insistieron", expuso Gamaliel Saldívar, parte del llamado Movimiento de Huelga.
Cabe señalar que tras terminar su encomienda, Federico G. Lugo Molina se retiró por completo de las actividades universitarias, para dedicarse a su profesión en la ciudad fronteriza y radicar los últimos años de su vida en la capital de la República Mexicana.
SJHN