En casi cuatro de cada diez hogares se ha tenido que vender algo y una de cada cinco familias se ha visto orillada a empeñar debido a la crisis económica que causa la pandemia de coronavirus.
Así lo indica la Encuesta de Seguimiento de los Efectos del Covid-19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos realizada por la Universidad Iberoamericana, a través del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad.
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Al respecto, activistas como Gabino López de la asociación Ganas de Ayudar, y Jorge Luis Moctezuma, de la Fundación Pathfinder, dijeron que el dato que arrojó dicha encuesta nacional es un reflejo fiel de lo que se vive en el estado y el sur de Tamaulipas, pues las familias han recurrido al comercio o al empeño de bienes para salir adelante.
Moctezuma expresó que los más afectados por esta crisis económica son principalmente personas de clase media, pues aunque parece crudo, la población de escasos recursos económicos ya desarrolló un sentido de resiliencia o adaptación a su condición, a diferencia de aquellas familias que jamás en su vida se habían enfrentado a una situación tan difícil.
“Venden comida, productos por catálogo o se deshacen de algún objeto de valor para llevarlo al empeño, pues las restricciones económicas han golpeado en el empleo y en los ingresos de las empresas”, dijo Jorge Luis Moctezuma.
En tanto, Gabino López sostuvo que la problemática impacta en mayor o menor medida a todos los eslabones de la cadena, desde el obrero que se quedó sin trabajo, el informal que no vende lo mismo que antes o el empresario que batalla para sostener la fuente de empleo o de plano tuvo que bajar la cortina temporal o definitivamente.
Encuesta Encovid-19
La Encuesta de Seguimiento de los Efectos del Covid-19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos, con corte a octubre y difundida el pasado mes de diciembre, concluye que la reducción de los ingresos en los hogares ha sido acompañada de un aumento en el uso de estrategias para satisfacer sus necesidades, a veces a costa de reducir su patrimonio.
Entre mayo y octubre, el porcentaje de hogares que recurrieron a pedir prestado a conocidos pasó de 24 a 37%, y aquellos que dejaron de pagar sus deudas o tarjetas de crédito de 18 a 30%.
Asimismo, uno de cada cinco hogares está empeñando algo, y 23% busca un trabajo secundario que le permita allegarse más ingresos en medio de sus complicaciones económicas.
Por otro lado, los principales programas sociales que reportan recibir los hogares son las Pensiones para el Bienestar (Adultos Mayores o Discapacidad) y las Becas Benito Juárez, que en octubre decían recibirlos un 13 y un 10% de los hogares, respectivamente.
Considerando al conjunto de hogares que declaran recibir algún programa social, aproximadamente 3 de cada 10 hogares es beneficiario. Además, 1 de cada 10 familias declara haber recibido alguna ayuda adicional por la emergencia del covid-19, tales como despensas, créditos u otro tipo de apoyos.
Uniendo ambos tipos de ayudas, 36% de los hogares en octubre reportó recibir algún tipo de apoyo del gobierno a nivel nacional. Este porcentaje era mayor entre los hogares de menor nivel socioeconómico (superior a la media nacional), que en aquellos de mayores recursos (donde menos de 30% de los hogares reciben apoyos).
La encuesta incluyó 1,674 entrevistas vía teléfono móvil a personas de 18 años o más en las 32 entidades federativas contactadas entre el 8 y el 22 de octubre.
CGCH