En el templo de El Coecillo en la ciudad de León se adaptó a la nueva normalidad y repartió la ceniza en sobres para que las familias leonesas la puedan tomar este miércoles que es cuando inicia la Cuaresma.
El padre Adrián Esparza, vicario de la parroquia de la Purísima Concepción de El Coecillo, comentó que desde el sábado son muchas personas las que han ido por los sobres y recomendó que el ritual religioso sea con toda la familia para que tengan a Dios en sus corazones.
“La imposición de ceniza es el día de mañana miércoles que nos recuerda a nosotros un signo muy particular, antes, quisiera decir, no es pecado sino se ponen la ceniza, no es tampoco una obligación el hecho de poder recibirla, es un sacramentado, es decir, expresa, nos manifiesta a nosotros de una manera muy particular la oportunidad de poder recordar lo que ya decíamos en el génesis, que venimos nosotros entonces de la tierra y hacia ella vamos”, comentó.
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Dijo que esta modalidad se debe a que la Arquidiócesis de León les hizo la encomienda de llevarla a cabo así para evitar la propagación del virus del Covid-19 dentro de los recintos religiosos.
Explicó que es un rito muy sencillo donde se invita a participar a toda la familia y que lean las oraciones que entregan junto con el sobre de la ceniza, hacer una reflexión y poner la cruz en la frente.
“En redes sociales de parte de la Arquidiócesis, este mismo folletito se ha llevado a cabo a través de infografías, sino tienen la posibilidad es muy sencillo, papá, mamá o alguno otro de los familiares hacen el signo de la cruz, este signo de la cruz significa que estamos apoyados por Dios, inmediatamente después alguien pide una oración y a partir de esta oración se comienzan a leer las lecturas propias del día de mañana”, agregó.
Posteriormente dijo que después pueden intercambiar ideas en familia para platicar qué es lo que entendió cada quien y así poder enriquecer la dinámica y se termina dando la acción de gracias.
El padre comentó que la ceniza está hecha de palmas y después se bendice la ceniza, por lo que no hay ningún inconveniente si la gente la hace en su casa, pues el punto es vivir la experiencia sin exponer su salud.