Fueron ordenados 14 diáconos y 33 sacerdotes en el Santuario de los Mártires de Cristo.
José Francisco Robles Ortega, Cardenal de la Arquidiócesis de Guadalajara, fue el encargado de llevar a cabo la celebración eucarística este sábado y domingo en el municipio de San Pedro Tlaquepaque.
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El sacramento del ordenamiento consiste en la consagración al ministerio del servicio a la iglesia y a Dios. Esto le exige dedicación plena y libre disposición a Dios.
La ordenación sacerdotal se realizó con la imposición de las manos y la oración consagratoria del Cardenal de la Arquidiócesis de Guadalajara, José Francisco Robles Ortega. El Obispo, en silencio, impuso las manos sobre la cabeza del diácono. Este gesto antiguo significa ya desde el tiempo de los apóstoles la transmisión del poder sacramental del Espíritu Santo.
En esta ocasión se llevó a cabo la ordenación de 14 diáconos y 33 sacerdotes, quiénes antes habitaban en el seminario menor y mayor ubicados en el Área Metropolitana de Guadalajara.
A esta celebración eucarística acudieron varios familiares, padres, sacerdotes y seminaristas para ser testigos del ordenamiento sacerdotal.
JMH