Samuel Purga habitante de la colonia El Tapatío en Tlaquepaque, es uno de los afectados por la escasez de agua que azota gran parte del Área Metropolitana de Guadalajara. Al ser dueño de una purificadora de agua, la afectación es doble ya que asegura cada vez hay más demanda ante la crisis del vital líquido y provoca que rápido se le acabe el abastecimiento de agua.
"Normalmente a mí una pipa me dura cinco días y ahorita he comprado el lunes, miércoles y hoy otra vez. O sea si la compré el lunes, normalmente la hubiera comprado hasta mañana y ahorita ya la compré tres veces, o sea si está muy muy demandada la venta", relató Samuel.
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Él debe administrarse porque también tiene que dejar algo para su casa donde habitan seis personas. Samuel y sus vecinos han realizado muchos reportes, pero como ya es costumbre, el SIAPA sólo da largas e incluso a algunas personas ni siquiera las atiende.
"Yo me tengo que llevar garrafones para vaciar en un tambo que tenemos ahí para bañarnos para lavar los trastes y todo eso.Los vecinos todos ya estamos hartos, pues todos comentan lo mismo, qué onda con el agua, se ocupa, es muy necesaria y ya estamos hartos todos de de lo mismo", lamentó el afectado.
Urge respuesta del SIAPA
Los habitantes de esta colonia se organizan para contratar pipas privadas, con un costo que oscila entre los 700.00 y 1,000.00 pesos, dependiendo la cantidad de litros, para poder subsistir en lo que se reestablece el servicio.
Al tratar de contactar al área de comunicación social del SIAPA, para conocer cuál es la situación que por la que atraviesan y cuántas colonias se encuentran con esta misma problemática, la respuesta fue la misma, es decir, ninguna.
Urge que alguien dé la cara y les explique la situación a los cientos de miles de ciudadanos que sufren por la falta de agua, porque los cobros por el servicio siguen.
OV