La familia Hernández está conformada por Guadalupe quien tiene problemas de visión, Erick su esposo, su hijo mayor de 13 y el menor de 7, quienes viven en una casa en Torreón, Coahuila, que tiene solo un baño de material y un espacio construido con madera, cartón y hule que es la cocina y la recámara a la vez en.
Tienen una litera con dos camas individuales en una duerme ella con sus dos hijos para que el frío no les pegue tan duro y cuando llueve “hay más agua adentro que afuera”, hace un mes les robaron sus pocas pertenencias que eran un televisor, tanque de gas, un ventilador y un codificador.
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Ella es Guadalupe Díaz Galaviz y tiene 34 años de edad. Vive en la colonia Zaragoza Sur, en un espacio de 7 por 16 metros y cuenta que en un ojo no tiene visión, tiene una prótesis, esto luego de que recién nacida fuera afectada por una bacteria en un hospital donde estaba internada .
“Me pusieron una prótesis en mi ojo desde que estaba en el kinder y luego hace unos años que me la cambiaron por que como crecí ya no me quedaba, ahorita tengo que cambiarla nuevamente ya que está dañada pero no tengo dinero para eso y quiero ir a cáritas porque me dijeron que ahi es donde apoyan a la gente de bajos recursos”, afirmó.
Estudió la secundaria en sistema abierto ya que dijo había reprobado muchas materias y prefirió esta opción. Se casó desde los 18 años y desde entonces vive con su pareja quien es de oficio albañil.
Su casa es solo un espacio construido con madera y hule donde solo cabe una litera, una televisión y un mueble con cajones y espejo, es su guardaropa el de todos, a unos cuantos pasos está el refrigerador y a un lado del mismo una parrilla para hacer la comida.
Al ingresar a su casa es caminar entre las latas de refresco que recolecta para ayudar económicamente a la familia, hay ropa también de la que dice es de segunda que vende en la casa de su mamá que se encuentra a la siguiente cuadra.
"¿El frío en esta casa?, pues mire en la noche nos dormimos mis dos hijos y yo en la litera de abajo con dos cobijas para tener menos frío mi esposo duerme en la de arriba y si cala como no porque entre la madera se cuela el frío. No hemos tenido dinero para poder hacer nuestro cuartito de material, está todo muy caro solamente nos alcanzó para el bañito".
Lluvias
Y peor cuando llueve, "hay más agua adentro que afuera" y cuando eso ocurre señala que se levanta a poner unos hules pero nunca son suficientes.
Mientras comparte las condiciones en las que vive, su rostro nunca deja de sonreír a pesar de las adversidades económicas.
Cuenta que tiene tres gatos se llaman Tom, Jerry, Fuina y dos perros Palomo y Chato, le gustan mucho los animalitos.
Víctimas de robo
Si no fuera suficiente su situación precaria narra que hace un mes que le robaron un poco de sus pertenencias.
“Salí yo como a las 9:00 am a vender ropa de segunda mano que es con lo que ayudo a la casa y resulta que regreso y ya no teníamos ni la televisión que me habían dado en un programa, el ventilador que nos ayudaba en tiempo de calor, el tanque de gas y un codificador".
Cuenta que a ella, lo que más le preocupa es la prótesis y si claro, si también pueden apoyar con algo de material para que su esposo construya el cuadro donde duermen para ellos sería un muy buen regalo navideño.
En esta colonia existen calles aún sin pavimento con baches y algunas viviendas construidas aún con madera, cartón y hule.
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