Como parte de la conmemoración del Día del Trabajo en México, alrededor de 600 trabajadores de la educación, salud, telefonistas, medios de comunicación y del Monte de Piedad, marcharon por las principales calles de la capital mexiquenses y se congregaron frente a Palacio de Gobierno para exigir respeto a sus derechos laborales.
Entre las exigencias estuvieron la reducción de la jornada laboral a 40 horas, mayores prestaciones, implicaciones de la reforma laboral, el pago de salarios caídos ante despidos injustificados y el emplazamiento a huelga.
Los trabajadores sindicalizados se reunieron frente a las oficinas del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), sobre Independencia e Isidro Fabela, así como en las inmediaciones del Jardín Zaragoza.
En la marcha participaron integrantes del Sindicato Unificado de Maestros y Académicos del Estado de México (SUMAEM), la Federación de Asociaciones Autónomas de Personal Académico de la Universidad Autónoma del Estado de México (FAAPAUAEM), y del Sindicato Único de Trabajadores y Empleados al Servicio de la Universidad Autónoma del Estado de México (SUTESUAEM).
Además del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, el Sindicato de Trabajadores del Monte de Piedad, trabajadores de los medios de comunicación de la organización Tenemos que Hablar, pensionados del Sindicato Único de Trabajadores de los Poderes, Municipios e Instituciones Descentralizadas del Estado de México (SUTEYM), y del Sindicado Nacional de Docentes y Trabajadores del Conalep (SINADOCO), provenientes de diversas partes de la república como Tlaxcala, la Ciudad de México y el Estado de México.
¿Qué se conmemora?
Este miércoles 1 de mayo se conmemora el Día del Trabajador, una fecha que conmemora la histórica lucha de los trabajadores por sus derechos y condiciones laborales justas. A lo largo de la historia, los movimientos obreros han sido la respuesta a las precarias condiciones de trabajo y vida a las que se ha visto sometida la clase trabajadora en diferentes regímenes.
Tras la Revolución Industrial, la explotación laboral, los salarios ínfimos, las jornadas interminables y el trabajo infantil se intensificaron, dando lugar al surgimiento de un movimiento obrero cada vez más fuerte.
En 1886, en Estados Unidos, una serie de protestas por la jornada laboral de 8 horas desembocó en la Revuelta de Haymarket, un evento trágico que marcó un hito en la lucha obrera. Tras varios días de manifestaciones, una bomba estalló durante un acto público, causando la muerte de varias personas. A raíz de estos hechos, cinco líderes sindicalistas anarquistas fueron condenados a muerte, convirtiéndose en los Mártires de Chicago.
PNMO