Imposible implementar operativo de alcoholemia en el municipio de Altamira por la falta de aparatos para medir el grado de alcohol en los conductores, por lo que siguen atendiéndose hasta dos accidentes por semana donde los responsables se desplazan en estado de ebriedad.
El delegado de Tránsito y Vialidad de esta ciudad, Santiago Cerecedo Maya, resaltó que al llegar a esta dependencia, no se contaba con los alcoholímetros para aplicar esta medida preventiva que puede reducir considerablemente el número de accidentes, sobre todo por la cercanía de las fiestas decembrinas, donde se incrementa la ingesta de bebidas embriagantes.
Para esto, han enviado un escrito al Gobierno del Estado para que a través de la Jurisdicción Sanitaria número 12, les otorguen los instrumentos necesarios para reactivar los operativos de alcoholemia en principales avenidas y cruces más peligrosos.
SJHN