El Valle de México debe impulsar acciones para un mejor manejo de su cuenca hídrica pues la solución real para evitar inundaciones en Tula se encuentra en esa zona y no aquí, insistió René Romero Rivera, activista de la agrupación Alto al Ecocidio en el río Tula y del colectivo En Defensa de la Vida en la región Tolteca.
Expresó que las obras que hace en el río Tula la empresa asignada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) son tardías pues ya está muy cerca la temporada de lluvias y agregó además que hay poco avance, el cual también se ve afectado por las últimas lluvias registradas.
Durante un recorrido con miembros de la agrupación por las obras que la empresa realiza a la altura del puente Metlac, afirmó que “lo están haciendo tarde, hubo una crecida del río y eso puede afectar desarrollo de las obras, pero aquí la solución no es que hagan un megacanal de concreto, sino que la cuenca del Valle de México haga un manejo integral de sus aguas, lo que implica reforzar sus zonas de captación, rescatar los ríos vivos, los lagos”.
Expresó que hay pueblos en resistencia y por ello dijo que “habría que hacer una lucha conjunta que tiene que ver con este despojo de los bienes naturales histórico-coloniales, porque ahora con el proyecto de desecación del lago de Texcoco ocho de los ríos que nutrían el lago fueron desviados por un colector al Túnel Emisor Oriente (TEO) y esa agua llega aquí, a Tula”.
Aún con el proyecto del rescate del lago, agregó, “esos ríos aún no los reencausan hacia allá, porque hay gente de la Conagua de los sexenios anteriores que sigue estando en la toma de decisiones; ese proyecto lo están saboteando desde el interior de la propia Conagua”.
Denunció que “el director del organismo de cuencas de agua del Valle de México es el mismo encargado del proyecto de desecación del lago para el proyecto aeroportuario, ahora es el encargado del rescate del mismo lago, es una contradicción”.
Este tipo de acciones generan dudas en torno a las decisiones y acciones de Conagua, dijo, por lo que en torno al proyecto del río Tula hay incertidumbre, pues aunque presuntamente sólo consideran tirar 400 árboles “nos queda la duda de que vayan a querer retomar todo el proyecto del 2016 por la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) ampliada hasta 2024”.
Esas dudas se mantienen pues “de parte de las autoridades no hay atención a la demanda de pobladores de pueblos ribereños del río Tula”, quienes serían los más afectados pues el gobierno federal sólo pretende traer más agua al Valle del Mezquital, sin considerar el manejo de las aguas en el propio Valle de México.
Esa no es la solución, resaltó, el agua del río Tula llega a la presa Endhó, la cual se encuentra muy ensolvada, pues se trata de una infraestructura con 70 años de antigüedad que ya no tiene la misma capacidad de almacenamiento, lo que representaría un problema para los pueblos que se encuentran después de dicha presa pues al no tener agua, está inundaría a las poblaciones situadas río abajo.