La Ciudad de México colabora con 80 voluntarios para la Fase 3 del estudio internacional Mosaico, con el que se espera obtener para 2024 una vacuna que prevenga el VIH.
Andrea González, directora ejecutiva del Centro para la Prevención y Atención Integral del VIH/Sida de la Ciudad de México, explicó que actualmente hay 80 participantes, no obstante, la captación de voluntarios será hasta septiembre, por lo que el objetivo es alcanzar los 150.
El trabajo lo coordina el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán y la investigación se lleva a cabo en las instalaciones de la Clínica Especializada Condesa Iztapalapa debido a la infraestructura y dimensiones con que cuenta.
Los resultados estarán hasta 2024 y, a la fecha, no se tiene previsto que se tenga información sobre logros parciales de la investigación, además de los ya conocidos en las Fases 1 y 2, cuyos resultados en primates y humanos son alentadores, informó la secretaría de salud.
El estudio es conducido internacionalmente por la HIV Vaccine Trial Network–HVTN, y es la primera vez que esta red internacional trabaja en México, junto con otras siete naciones. Es una investigación a gran escala dirigido a hombres y personas trans que tienen relaciones sexuales con hombres y/o personas trans.
Si Mosaico demuestra que el estudio de la vacuna desarrollada por Janssen funciona, será un gran paso en la prevención del VIH, indicó la autoridad sanitaria.
El protocolo en el que participan las personas elegidas tiene una duración de dos años y medio e implica que asistan a revisión un total de 14 veces durante el periodo. Asimismo, se realizan pruebas de detección de otras infecciones de transmisión sexual (ITS) como hepatitis B y C, clamidia, gonorrea y sífilis, que atiende la clínica. Se trata de un paquete de prevención integral; detección, atención y tratamiento de ITS que incluye dotación de condones y lubricantes.
Quien es elegible recibe de inmediato la primera dosis de la vacuna experimental; la segunda a los tres meses; la tercera a los seis y la cuarta y última al año. En los primeros 12 meses se completa el esquema de vacunación. En el segundo año y medio siguientes ya no se aplica el biológico.
Durante el tiempo que dura el estudio se brinda consejería para la reducción de prácticas de riesgo por vía sexual y se realizan pruebas para conocer el efecto de la vacuna experimental en el sistema inmunológico, tanto en las células de defensa y anticuerpos. En estos dos años y medio se monitorea la seguridad de los voluntarios a quienes se aplica la vacuna.
Es la primera vez que una vacuna experimental contra el VIH llega a Fase 3 en casi 40 años de pandemia. Las primeras dos fases han dado resultados esperanzadores en primates y humanos, detalló por aparte la autoridad sanitaria.
“Me parece muy bien, me parece fundamental que se esté aplicando. Es fundamental el desarrollo científico para atender la pandemia”, indicó Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno.
icc