Productores de jícama en Tampico Alto, Veracruz enfrentan dificultades económicas, debido a la presencia de agresivas plagas como la roya y la mancha, que frustran las cosechas y encarecen de forma desmedida el proceso de producción, lamentó Alfredo Gallardo.
Se trata de fuertes plagas que prácticamente han acabado con sembradíos de jícama, y a esto se suma que la calidad de la tierra se han reducido gravemente, lo que deriva que muchos factores jueguen en contra de los agricultores.
"Es muy lamentable, la presencia de las plagas, actualmente el rendimiento por hectárea es muy limitado, los agricultores están muy preocupados por esta situación, que sin duda no deja ninguna ganancia económica, por el contrario son importantes pérdidas", indicó.
Agregó que las plagas que son muy agresivas, y hasta los pesticidas más costosos, no pueden con ellas, y en pocos días, pueden echar a perder la inversión de un año, y dejar en la quiebra total al productor.
"La roya es una plaga visible, las hojas de la jícama se comienzan a amarillar, mientras que hay otras plagas que dañan de forma interna al producto y no lo dejan crecer, se ve bien por fuera, pero por dentro se seca y así no puedes comercializar y todo se suma en pérdidas", comentó.
Manifestó que a nivel nacional no se cuenta con empresas que produzcan pesticidas y fungicidas, y por ello todos son importados y los precios son muy altos, mucha gente evita sembrar porque ya el temporal es muy inestable las lluvias.
JKSC