Celebran al Señor de la Humildad regalando 10 mil tortas en Villa de Tezontepec

De milanesa, pierna y salchicha, torteros regalaron tortas a los asistentes, las cuales se daban a las personas a través de un boleto en los diferentes puestos.

Torteros de Villa de Tezontepec regalaron diez mil tortas a los asistentes a la cabecera municipal (Jorge Sánchez)
Alejandro Reyes
Villa de Tezontepec; Hidalgo /

Entre música, tortas y miles de personas, habitantes de Villa de Tezontepec, Pueblo con Sabor, celebraron este lunes 1 de mayo, el Día del Tortero en honor al santo patrono, el Señor de la Humildad.

Torteros de Villa de Tezontepec regalaron diez mil tortas a los asistentes a la cabecera municipal, las cuales se daban a las personas a través de un boleto en los diferentes puestos.

Entre los productores se dieron cita Super Tortas Chuchín, Tortas Juan Orozco, Super Tortas Pachuca, Tortas el Güero, Una Tortita, Tortas Pachuca, Tortas Pino, Tortas Inés, Super Tortas don Bences, Tortas Yayo y Tortas Kanos.

Alejandro Bautista Hernández, de Tortas Kanos, dice que ser tortero es un orgullo. Ha dedicado 30 años de su vida a ser tortero. Su hermano Luis le enseñó el oficio acá en Villa de Tezontepec. Cuenta que solo tiene estudios de secundaria y empezó a vender tortas por necesidad. Le pide y venera al Señor de la Humildad.

David García Cruz, de Tortas Pachuca, cuenta que el ser tortero es el oficio de Villa de Tezontepec, que todo mundo lo aprende y que lleva en él 17 años, “es como cualquier oficio, hay que chingarle”.


Las tortas son gratis, se accede a ellas a través de un boleto. Las filas para cada uno de los puestos son interminables. El jardín de la cabecera municipal es una serpiente de hombres, mujeres, niños, parejas, familias enteras en espera de una torta sin importar la furia del sol a las tres de la tarde.

Minutos antes, el párroco de la iglesia dio un mensaje y bendijo los alimentos, las tortas, con la imagen presente del santo patrón, el Señor de la Humildad, el santo de los torteros. Desde 1997 se celebra en Villa de Tezontepec el Día del Tortero.

Jesús Alejandro Ávila Enciso dice que tenía diez años cuando empezó a hacer tortas y lleva más de 30 en el oficio. Le enseñó un primo suyo, Pedro Romero, quien ya falleció.

Asegura que es un orgullo ser tortero porque son sus raíces y es un oficio muy noble. Cuenta que Villa de Tezontepec es cuna de torteros y que los que hay en la Ciudad de México, Tlaxcala y Querétaro son de acá.

“Es muy satisfactorio, de aquí sacamos a nuestras familias adelante, yo tengo dos hijos”, dice. A Jesús le tocó preparar alrededor de dos mil tortas para regalar a la gente este día.

La tradición de los torteros en Villa de Tezontepec tiene cerca de 50 años. Para este Día del tortero se prepararon para regalar a la gente tortas de milanesa, pierna y salchicha.

Ezequiel Rodríguez Gutiérrez lleva 47 años en Tortas Pino. Cuenta que él es la segunda generación, que su padre, también de nombre Ezequiel, fue quien inició con el oficio en la familia.

“Ser tortero significa mucho, es algo que nos apasiona, lo hace uno con gusto”, cuenta el hombre bajito, playera roja y barba de candado quien también es licenciado en administración pública y ciencias políticas por la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo pero lo suyo es ser tortero.
Ezequiel Rodríguez asegura que es una satisfacción ver cómo las personas disfrutan al comerse las tortas, “desde los tres años estoy en el oficio, mi papá me llevaba a todos lados”.

El tortero, originario de Villa de Tezontepec, pero con un puesto en la Ciudad de México, cuenta que el oficio no da para vivir con lujos pero sí cómodamente y cubrir sus necesidades.


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