Con restricciones y bajo protocolos de sanidad, este domingo se llevó a cabo la sexagésima quinta visita de la Virgen de Zapopan al Lago de Chapala.
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La celebración eucarística fue oficiada por el arzobispo de Guadalajara, José Francisco Robles Ortega desde la Parroquia de San Francisco de Asís del municipio.
Durante la homilía, el cardenal llamó la atención a la comunidad católica por dejar a un lado la fe en medio de la pandemia que atravesamos.
“En este tiempo que estamos viviendo, hermanos y hermanas, pareciera que muchos creyentes, muchos discípulos y discípulas de nuestro Señor Jesucristo, a Dios lo han puesto en un paréntesis; como que dicen Dios también que se espere, allá que viva su cuarentena, él que se quede guardado allá porque no tiene nada que ver con esto que nos está pasando o al menos así se percibe como si Dios se desentendiera”.
Además de venerar a la Reina del Lago de Chapala para que traiga un temporal factible que beneficie a los jaliscienses, a manera de analogía, pidió a la intercesora haga llover bendiciones sobre quienes sufren los estragos de la emergencia sanitaria por covid-19.
“Pero sobre todo, pidámosle a la Santísima Virgen, Reina del Lago, Nuestra Señora de Zapopan, que interceda ante su hijo para que haga llover sobre nosotros, sobre nuestra humanidad abundantes lluvias que refresquen el corazón de tantos y tantas hermanas que están viviendo las consecuencias más crudas de esta crisis”.
JMH