King Kong (plátano), De Larce (pretzel), Scooby Doo (galleta con chispas de chocolate), La Félix (trozos de chocolate), Spock (nuez), Snoop Doog (aritos de sabores), Tony Montana (palomitas de maíz), incluso tocino, son algunas de las variedades que emprendedores mexiquenses realizan en Munchin Donuts.
Los glaseados de fresa o chocolate claro y oscuro, traído especialmente de Guadalajara, son la base de las donas que se han reinventado y cuyos colores y combinaciones van de lo dulce a lo salado y en algunos casos incluyen helado, para atrapar el paladar de los más exigentes.
“Vendemos todo tipo de donas con un topping final, chocolate Ferrero, Kit Kat, galleta, cereales, panditas, donas saladas con fruta natural –durazno, fresa o plátano- incluso pizza o tocino, todo depende del gusto. Le damos variedad a los clientes, muchos buscan la de chocolate, pero cuando prueban alguna de nuestras especialidades se enamoran”, refiere el propietario de este concepto, Joel Lechuga García.
La normal tiene 10 centímetros de diámetro y la mini mide la mitad o menos, sin embargo, todo depende del hambre que se tenga o para qué se ocupe. Las grandes se pueden degustar en el transcurso del día y las minis como bocadillo. “En una reunión o cumpleaños sirven como un aperitivo pequeño”.
Por su concepto, 70 por ciento de sus clientes siempre son nuevos porque en muchos casos van de paso, empero, tienen a los de siempre que viven en Xonacatlán, Villa Cuauhtémoc, el Parque Industrial Toluca 2000, Santa María Tlalmimilolpan, Atarasquillo y fraccionamientos como Misiones o Hacienda del Valle.
Las del día con un rico complemento
Todas las donas son del día y son elaboradas por un panadero de Xonacatlán con una receta especial, llevan chocolate base y el topping depende del cliente.
Las donas, al igual que otros productos, les permiten crear especialidades de temporada: Navidad, Día de Muertos, Día del Amor y la Amistad, incluso con helado, especialmente, cuando hace mucho calor. “Se vende muy bien porque la gente de la zona está acostumbrada y replica la famosa ‘torta de helado’ que heredó Don Simón al municipio”.
Capuchino, americano o malteadas de fresa, chocolate, vainilla, sobre todo, mazapán y tocino, así como lo leen, son los mejores complementos para la donas. “Suena loco, pero la de tocino es muy rica y dulce porque lleva maple adicional”.
Sorteando la pandemia
Con un año de vida, este negocio, ubicado en el kilómetro 50 de la carretera libre Toluca-Naucalpan, en la parada del Espino, ha sorteado la pandemia por covid-19 y busca, al igual que miles de unidades económicas en todo el país, mantenerse en el mercado.
Si bien se trata de una franquicia rentable que nació en 2015 en Tijuana, Baja California, la pandemia ha obligado a sus similares de Plaza Outlet en Lerma, Santiago Tianguistenco y Pilares en Toluca a bajar la cortina. Aunque persisten puntos en Town Square y Pabellón Metepec, Plaza Santín, el centro de la capital mexiquense, Atlacomulco y Ciudad de México.
“Son 80 puntos de venta a nivel nacional y uno en Ecuador, la idea de instalarnos en Xonacatlán surgió porque no hay ningún lugar con estas características de la calidad y servicio. Para encontrar algo similar hay que ir hasta Toluca o los grandes centros comerciales”.
Antes de la pandemia, preparaban 100 donas en promedio todos los días, sin embargo, sus ventas bajaron 40 por ciento y hoy han recuperado cuando menos 10 por ciento. “Cerramos los meses más complicados, abril y mayo, por seguridad propia, en junio muchos de los clientes nos empezaron a buscar y fue que decidimos reabrir”.
Al igual que otros sectores, la interacción con sus clientes a través de las redes sociales –Facebook, Instagram o WhastApp- ha sido la mejor alternativa para sobrevivir, pues solo reciben y entregan pedidos. Ante el aumento en el número de casos por covid-19, lo que menos quieren algunas personas es exponerse y acudir a lugares que no respeten los aforos permitidos.
“Todas nuestras ofertas dos o tres por uno, por ejemplo, van por ahí, la mayoría de las personas están utilizando estos medios para comprar, adquirir o vender; nosotros estamos haciendo lo mismo. Los clientes nos llaman o escriben un mensaje de WhastApp o Facebook y preparamos todo”.
Mantener los precios para seguir en el mercado
En los últimos meses cientos de personas han perdido sus empleos y quienes lo tienen tratan de cuidar sus ingresos, es decir, gastan en lo estrictamente necesario o productos de primera necesidad.
Por ello, Munchin Donuts no se ha permitido subir sus precios, 25 pesos la pieza, pues en definitiva iría a la quiebra o cerraría. “Vamos a mantenerlos hasta que podamos para sobrevivir como negocio porque nuestros clientes siguen viniendo”.
Medidas de prevención
Para respetar las medidas implementadas a las unidades económicas ante el coronavirus, Munchin Donuts modificó su horario y abre de 11 de la mañana a 8 de la noche.
Solo permite las reuniones de dos o tres personas como máximo, pues cuenta con internet y aunque el confinamiento no permite hacer cosas libremente como antes, te esperan con mucho gusto.