María vive en Zapopan, tiene 6 hijos y 15 nietos. Cada año se reúnen para cenar en familia en Navidad, pero este 2022 será la primera vez que sus posibilidades económicas no les permiten comprar alimentos para una tradicional cena navideña.
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"Pues muy triste que no va a haber para uno cenar. No les pagaron a mis nietos y por eso no compraron nada", dijo.
A María la invade la nostalgia en estas fechas pues recuerda que en navidades anteriores era su hija mayor quien organizaba la cena navideña pero este año ya no fue posible porque falleció en 2021 de covid-19, a los 46 años de edad.
"Ella nos ayudaba mucho, trabajaba en casa. Nos ayudaba mucho cada año, cada año nos compraba cosas y nos invitaba para ir a cenar”, compartió.
La mujer de 69 años admite que cada vez se vuelve más difícil subsistir.
"Ahorita, así como está tan caro las cosas y luego como no hay mucho trabajo pues aquí nomás es mi hija quien trabaja y ella es quien nos da de comer", señaló.
En una pequeña casa hecha de ladrillos, madera, laminas y lonas, viven ella y 10 integrantes de su familia, entre hijos y nietos. Para cocinar solo cuentan con una pequeña parrilla.
Hace 25 años, María migró con su esposo e hijos del municipio de Pátzcuaro, Michoacán a Zapopan, con la esperanza de tener una mejor calidad de vida, pero la pobreza y marginación siguen siendo una realidad para ellos.
"Ahí en mi pueblo ahí es puro para trabajar, puro para pescar y luego no hay donde sembrar en ninguna parte por eso venimos para acá a trabajar", recordó.
MC